Felipe Calderón asegura que él sí combatió al crimen organizado; internautas le recuerdan nexos de García Luna con el narco

El expresidente de México Felipe Calderón Hinojosa volvió a defender su estrategia de combate al crimen organizado, esto justo en la semana en la que la presidenta Claudia Sheinbaum dio a conocer su plan para la seguridad del país y prometió que no retomaría la “guerra contra el narco”.

A través de un mensaje compartido en la red social X (antes Twitter), Calderón aseguró que durante su mandato (2006-2012) luchó contra los cárteles utilizando “toda la fuerza del Estado”, una estrategia que sigue defendiendo como la correcta, pese a las críticas que ha recibido en los últimos años.

En el tuit, el exmandatario insistió en que el combate frontal a los grupos delictivos es una obligación del gobierno: “Yo sí combatí a la delincuencia y al crimen organizado con toda la fuerza del Estado, porque eso es lo correcto, porque es el deber de cualquier gobierno”, se lee.

Calderón Hinojosa argumentó que la violencia en México no es provocada por enfrentarse a los criminales, sino por dejarlos operar sin control, lo que genera disputas territoriales entre grupos delictivos y deja a la población vulnerable ante su poder. “La violencia se debe a la disputa territorial entre grupos y a la ausencia del Estado que deja a los ciudadanos a merced de los criminales”, añadió.

El tuit de Calderón fue publicado junto a una entrevista que concedió en abril de este año a El Financiero Bloomberg, en la que defendió su estrategia de seguridad. En esa conversación, el expresidente dijo que, aunque se cometieron errores, fue esencial “no tolerar” a los grupos criminales y reconstruir las instituciones de seguridad y justicia.

“Si siguen pensando que la violencia está por una declaración de guerra que dicen que hice, que no existe, porque nunca hice una declaración de guerra al narco, la causa de la violencia no es eso”, sostuvo Calderón, reiterando que las verdaderas causas son la lucha entre los cárteles y el crecimiento del mercado de drogas en México.

Sin embargo, las palabras de Calderón en redes sociales generaron una ola de reacciones que destacaron su relación con Genaro García Luna, su exsecretario de Seguridad Pública, quien tiene las horas contadas para recibir una condena por sus vínculos con el narcotráfico.

En los comentarios a su tuit, diversos internautas criticaron que el exmandatario hable de combatir el crimen mientras su principal colaborador en seguridad fue arrestado por colaborar con el Cártel de Sinaloa. El nombre de Genaro García Luna se convirtió en trending topic durante un momento en X.

“¿Para cuándo asumes la parte de la responsabilidad que te toca, por haber nombrado al narco Genaro García Luna como el principal encargado de la seguridad del país, en tu espurio gobierno?”, le cuestionó un usuario, haciendo eco de las numerosas críticas que ha recibido Calderón por la designación de García Luna.

Otro comentario destacó: “Qué derroche de descaro decir que combatió al crimen organizado cuando su Secretario de Seguridad Pública está hoy detenido por sus nexos con el narcotráfico”.

García Luna fue detenido en diciembre de 2019 en Estados Unidos y en febrero de 2023 fue declarado culpable de cinco cargos, entre ellos narcotráfico y complicidad con el Cártel de Sinaloa, liderado por Joaquín “El Chapo” Guzmán. Durante el juicio en una corte de Nueva York, varios testigos lo señalaron como colaborador de los cárteles, y el veredicto concluyó que facilitó el tráfico de drogas hacia Estados Unidos a cambio de millonarios sobornos.

Se espera que García Luna reciba su sentencia definitiva el próximo 16 de octubre, después de que su audiencia fuera pospuesta en varias ocasiones.

Mientras Calderón defiende su legado en materia de seguridad, la actual presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, ha dejado claro que no retomará la estrategia de militarización y combate frontal que caracterizó el sexenio del panista.

En una conferencia de prensa reciente, Sheinbaum aseguró que su enfoque para combatir el crimen organizado será distinto, priorizando la prevención y el uso de inteligencia por encima de la fuerza militar. “No va a regresar la guerra contra el narco”, declaró la mandataria, en referencia a la ofensiva desplegada en 2006, cuando Calderón ordenó la participación activa del Ejército en las operaciones contra los cárteles, una decisión que desencadenó una escalada de violencia en el país.

La estrategia de Sheinbaum se basará en atacar las causas estructurales de la criminalidad mediante inversión social, así como en fortalecer a las instituciones de seguridad y justicia. Entre las acciones inmediatas de su plan está consolidar la militarizada Guardia Nacional y mejorar la coordinación entre las diferentes fuerzas de seguridad estatales y federales. Además, se enfocará en los estados más afectados por la violencia, como Guanajuato, Baja California, Jalisco y Sinaloa, donde se registran altos niveles de homicidios y extorsiones.

El secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, también ha destacado el papel central que jugará la Guardia Nacional en la nueva estrategia, subrayando la necesidad de garantizar una mayor presencia de las autoridades en las comunidades que hoy en día no cuentan con cuerpos policiales confiables.

La violencia en México sigue concentrada en zonas estratégicas para el narcotráfico, como rutas de trasiego de drogas y puertos de entrada de precursores químicos, lo que convierte la seguridad en uno de los desafíos más grandes para la nueva administración.