Los llamados gastos hormiga son pequeñas erogaciones que hacemos de manera cotidiana y que, aunque parezcan insignificantes, terminan afectando considerablemente nuestras finanzas.
Según la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), estos gastos repetitivos pueden sumar entre 16 y 32 mil pesos anuales, poniendo en riesgo tu estabilidad económica sin que lo notes.
Los gastos hormiga son aquellos que hacemos casi sin pensar. Por ejemplo, el café de la mañana, la goma de mascar que compramos después de comer, o esa torta rápida que adquirimos para una merienda.
Aunque parecen insignificantes cuando los pagamos individualmente, al sumarlos a lo largo del año representan un impacto importante en nuestras finanzas personales.
Profeco recomienda hacer un presupuesto
Para evitar que estos pequeños gastos afecten tu economía, la Profeco recomienda llevar un control financiero mediante un presupuesto.
Este te ayudará a identificar cuáles son esos gastos hormiga y dimensionar el impacto económico que tienen en tu cartera. Al ser consciente de ellos, podrás tomar decisiones más informadas sobre en qué gastar y en qué no.
¿Cuánto pueden costarte los gastos hormiga?
Profeco realizó un análisis de los productos que más se consumen de forma cotidiana y que encajan en la categoría de gastos hormiga. Aquí algunos ejemplos:
- - Café: entre 12 y 45 pesos por taza.
- - Goma de mascar: de 9.50 a $12.50 pesos.
- - Pan: de 6.50 a $14 pesos por pieza.
- - Frituras: de 11 a $15 pesos.
- - Refresco (600 ml): de 13.70 a $17 pesos.
- - Torta: de 18 a 30 pesos.
De acuerdo con la estimación de Profeco, si consumes estos productos a diario y eliges los precios más bajos, tu gasto anual puede llegar a los 16 mil 968 pesos.
Por otro lado, si optas por los productos de mayor precio, el monto podría duplicarse hasta alcanzar los 32 mil 040 pesos al año.
Cómo reducir los gastos hormiga
Para evitar que estos gastos vacíen tu bolsillo, Profeco sugiere realizar un análisis detallado de tus compras diarias. Hacer un presupuesto es el primer paso para identificar estos gastos innecesarios y reducirlos.
También puedes optar por alternativas más económicas o incluso preparaciones caseras, en el caso de la comida o bebidas, lo que te permitirá ahorrar una cantidad significativa de dinero.
Aunque estos pequeños gastos pueden parecer insignificantes, es importante controlarlos para no afectar tu economía a largo plazo, ya que con lo gastado, podrías adquirir un bien que tenga mayor durabilidad.