Por qué a la presidenta Claudia Sheinbaum no le gusta la palabra militarización

La militarización del país va más allá del tema de la seguridad pública; se entregaron aduanas, obras, el INM y más de 300 atribuciones civiles a militares, afirma el académico René Gerez

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Sheinbaum aseguró que en su administración se continuará el fortalecimiento de la Guardia Nacional. Crédito: SEDENA
Sheinbaum aseguró que en su administración se continuará el fortalecimiento de la Guardia Nacional. Crédito: SEDENA

Durante su primer discurso como presidenta de México, Claudia Sheinbaum, negó que el paso de la Guardia Nacional a manos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) se trate de militarización: “Quién lo crea, está completamente equivocado”, lanzó.

En palabras de Omar García Harfuch, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), “no habrá militarización” porque será la dependencia a su cargo quien diseñe la estrategia de seguridad y coordinar el gabinete en la materia; es decir, será un civil quien aglomere la inteligencia y acción militar, naval y financiera para enfrentar a las organizaciones criminales en el país.

Han sido varios los políticos de la 4T que han negado que el país esté militarizado en materia de seguridad; el propio expresidente Andrés Manuel López Obrador fue uno de los más férreos defensores del Ejército Mexicano y quien les entregó contratos de obra pública, el control de las aduanas y aeropuertos, la supervisión y acción del Instituto Nacional de Migración (INM) y, contrario a su promesa de campaña, el control de la Guardia Nacional.

“Más allá de la seguridad nacional, el problema es que la militarización no se limita a ello; el gobierno (de AMLO) le entregó a las Fuerzas Armadas muchas atribuciones civiles para las cuáles tampoco fueron capacitadas, No les gusta la palabra militarización, pero no hay otra forma de llamarlo”, sentenció René Gerez López, investigador de la organización Causa en Común.

Infobae México conversó con el especialista respecto a si México enfrenta o no una militarización, como lo niegan la hoy Presidenta y su encargado de la seguridad pública; Gerez López resalta que durante la pasada administración se entregaron más de 300 atribuciones civiles a la Fuerzas Armadas.

“No son nada más las atribuciones civiles, sino los presupuestos que conllevan esas actividades”.
Secretary of Security and Citizen Protection Omar Garcia Harfuch speaks as Mexico's President Claudia Sheinbaum looks on during a press conference to present a security plan for confronting Mexico's dire security situation, at the National Palace, in Mexico City, Mexico October 8, 2024. REUTERS/Henry Romero
Secretary of Security and Citizen Protection Omar Garcia Harfuch speaks as Mexico's President Claudia Sheinbaum looks on during a press conference to present a security plan for confronting Mexico's dire security situation, at the National Palace, in Mexico City, Mexico October 8, 2024. REUTERS/Henry Romero

El rechazo de Sheinbaum a la militarización

El especialista remarca que en el fondo del tema del pase de la Guardia Nacional a la Sedena y del discurso sobre el mando civil, existen 15 secretarios de seguridad locales que son militares, además de más de dos mil funcionarios públicos en instituciones de seguridad que tienen un adiestramiento castrense.

“No les gusta porque en el imaginario colectivo se tiene la idea correcta, debido a los antecedentes, de que la militarización implica violaciones a los derechos humanos, falta de transparencia”.

René Gerez López recordó que en el siglo pasado ocurrieron varios casos de militarización en países de América Latina, pero lentamente los gobiernos se fueron alejando de esa figura; por ello hace mucho ruido que en pleno 2024 y contrario a la promesa presidencial lanzada en 2018 -para la creación de la Guardia Nacional el 26 de marzo de 2019- “regrese el fantasma de la militarización”, a pesar de que desde 2006 los militares en México comenzaron a participar en labores de seguridad pública.

“Les molesta la palabra militarización porque tiene una connotación negativa. Nadie conoce una acepción distinta o positiva de la palabra militarización en este país, porque tenemos esos antecedentes en donde las Fuerzas Armadas han participado y violado los derechos humanos”.

Además del imaginario colectivo, la izquierda mexicana - resalta el especialista- siempre intentó dejar fuera la militarización y alejar a los mandos castrenses de las Fuerzas Armadas; sin embargo, “hoy la estrategia, la única estrategia, es esa”:

“Se retiraron los fondos a las policías civiles (locales y estatales), se desapareció la Policía Federal, la Guardia Nacional está en manos de la Sedena. No es atractivo, pero lamentablemente no hay ninguna otra manera de llamarlo: es militarización”.

Es preciso señalar que durante el primer día de gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, militares dispararon contra una camioneta que transportaba migrantes por el estado de Chiapas: seis murieron. Según la versión oficial, los migrantes eran transportados en una camioneta por traficantes de personas; los militares escucharon una detonación y decidieron abrir fuego y utilizar la fuerza letal.

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