Cuál es la fruta con menos azúcar que recomiendan para perder peso después de los 40 años

En la búsqueda por bajar de peso, muchas personas deciden realizar dietas en las que el consumo de fruta disminuye debido a que aportan azúcares pero la realidad es que proporcionan múltiples nutrientes que son sumamente importantes para la salud.

De acuerdo con diferentes medios especializados en salud, entre ellos Medline Plus, a partir de los 40 años el cuerpo humano comienza un proceso en el que la apariencia cambia y aunque es inevitable, es posible hacer que acelere su paso o vaya a un ritmo menor, por lo que la alimentación así como los hábitos saludables, juegan un papel muy importante.

El consumo de fruta será fundamental debido a que aportan diferentes vitaminas y minerales pero siempre se aconseja visitar a un médico para que realice un estudio detallado sobre lo que es recomendable.

Ante una situación muy específica el consumo de la toronja es una solución viable debido a que no contiene tanta azúcar como otras frutas.

De acuerdo con el artículo “¡No te imaginas lo que te puede hacer la toronja!” publicado por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural del gobierno de México, sus propiedades se deben a la presencia de vitaminas C y A, las cuales se encuentran en mayor cantidad, los flavonoides y el ácido fólico, mismos que ayudan a disminuir la cantidad de colesterol, mantienen hidratada la piel, previenen enfermedades como el cáncer y contribuyen a bajar de peso.

Según el mismo artículo “mejora la circulación, fortalece el cabello y uñas, previene enfermedades respiratorias como la gripe y resfriados”, además elimina parásitos intestinales, regula la tensión y reduce el estreñimiento. De la misma manera, ayuda a evitar el envejecimiento prematuro.

De acuerdo con estudios científicos citados por El Español, entre sus propiedades destaca el bajo nivel de calorías que tiene, ayuda a mantenerse hidratado debido a la cantidad de agua que posee y debido a que es rica en fibra dietética, da la sensación de saciedad y ayuda a regular el apetito además de que mejora la digestión.

Debido a su bajo índice glucémico ayuda a regular los niveles de azúcar en la sangre, con lo que es posible evitar los picos de insulina. Estos son los principales responsables de que se almacene una mayor cantidad de grasa.

Junto a estas propiedades también aparece la naringenina, que es un antioxidante flavonoide relacionado con la mejora de la sensibilidad a la insulina y a la reducción de la acumulación de grasa corporal.

Con lo anterior es posible mejorar la salud metabólica y tener efectos positivos sobre los niveles de colesterol y triglicéridos que con sus propiedades diuréticas suaves se disminuye la retención de líquidos.

Aunque suele ingerirse en gajos, algunas personas recurren a los jugos de toronja con otras frutas pero siempre se aconseja que la dieta sea definida por un especialista.

El Poder del Consumidor señala que se puede servir como aperitivo, guarnición de algunos platillos fuertes como el pescado, igual puede ser un ingrediente para ensaladas o postres nutritivos pero menciona en el mismo artículo que no es recomendable su consumo en jugo debido a que “pierde sus propiedades en el proceso”.

Como la fruta pasa por oxidación de manera rápida, su consumo en jugo impide que se forme un bolo alimenticio junto con la fibra, lo que resta beneficios al intestino.

El informador señala que “su consumo depende de la dieta individual de cada persona” pero comparte algunas pautas como ingerir media toronja antes de los alimentos para que regule el apetito y que la sensación de saciedad sea mayor.

También se recomienda que se incluya una variedad de alimentos ricos en proteínas, grasas saludables y carbohidratos complejos, pero nuevamente se sugiere acudir con su médico de cabecera o un especialista que oriente de mejor manera la dieta para que los resultados sean los deseados.