La actriz mexicana Denalí Sanara ha emergido como una de las revelaciones más notables de la actuación tras su participación en la serie “Los Reyes de Oriente”, disponible en Netflix.
Con apenas un par de años en la industria, su papel ha logrado captar la atención de la audiencia, posicionando a la producción dentro del top 10 de la plataforma de streaming. La serie, ambientada en la Ciudad de México, explora las complejidades de la vida en Iztapalapa, un barrio caracterizado tanto por sus desafíos como por su riqueza cultural. En ella, Sanará interpreta a Rizos, una adolescente de 15 años que enfrenta dilemas sobre poder, lealtad y destino.
Denalí, originaria de Jonacatepec, Morelos, describió el proceso de creación del personaje de Rizos como una experiencia profundamente transformadora. “Toda la construcción del personaje de Rizos fue un proceso que yo disfruté mucho y que me regaló mucho crecimiento tanto como persona y como artista”, comentó.
La actriz destacó la complejidad emocional del personaje y cómo debió enfrentarse a la dificultad de proyectar una dureza que no venía naturalmente para ella: “Que fue el lado que más se me dificultó al momento de darle vida a Rizos, como ese carácter, esa fuerza, esa rudeza que exigía el personaje”. Sin embargo, Sanará descubrió que la necesidad de Rizos de ser fuerte no era más que una estrategia para sobrevivir en su entorno. “Ese deseo de querer ser fuerte era más más que nada por mantenerse a salvo para sobrevivir, que por abrirse camino”.
Denalí Sanará expresó su orgullo al ser parte de una serie que, según ella, desafía los estereotipos sobre los barrios mexicanos. La actriz enfatizó la importancia de retratar de manera auténtica la realidad de Iztapalapa, mostrando tanto sus peligros como su lado más colorido y lleno de vida. “Estamos como muy acostumbrados a que todo lo que solemos mostrar en medios audiovisuales como es el cine o la televisión es muy estereotipado”, explicó Sanará. “Los Reyes es un acto muy valiente de mostrar las cosas tal y como son... no solamente el estereotipo de que se tiene de gente de barrio”.
Para Danalí Sanará, el proyecto no solo representa un desafío actoral, sino también una oportunidad para dar visibilidad a las historias no contadas de los barrios populares en México. “Iztapalapa... tiene personas, gente que tienen una historia, que tienen vidas y valores y una identidad”, añadió la actriz, enfatizando que el orgullo que siente por su trabajo proviene de poder reflejar una parte esencial de la cultura mexicana en una producción internacional. La serie se convierte así en un espejo que refleja la riqueza cultural de Iztapalapa, más allá de los prejuicios asociados al lugar.
Denalí también compartió cómo su participación en “Los Reyes de Oriente” le permitió trabajar junto a figuras destacadas del cine mexicano, como María Rojo, Roberto Sosa e Ingrid Aquila. Al principio, confesó haberse sentido intimidada por la experiencia y el talento de sus compañeros, pero pronto descubrió que fue acogida con generosidad. “Siempre me gusta mencionar que gracias a que me rodee de actores justamente que están en un nivel muy alto de profesionalismo, me enriqueció bastante a mí como persona y como artista”, mencionó Sanará.
Sobre el ambiente de trabajo, añadió: “Creo que al inicio inicié con un sentir de timidez, como cohibida, como sintiéndome inferior porque pues tú los ves al momento de estar ya en acción, y ves su habilidad, su agilidad que ya tienen... pero justo siento que que gracias a ellos, también eran muy generosos, muy bondadosos conmigo, justo me abrazaron”. Este apoyo por parte de actores con una amplia trayectoria le permitió a Denalí crecer profesionalmente y sentir confianza en su propio talento.
Al reflexionar sobre su corta pero prometedora carrera, Denalí compartió el consejo que le daría a su yo de pequeña, que soñaba con ser actriz: “Lo primero que le diría es que acepte lo que es y que se ame mucho porque una vez que encuentre esa confianza interna todo lo demás va a tener mucho más sentido”. Para Sanará, la clave del éxito radica en el autoconocimiento y en abrazar tanto los miedos como los errores. “Una vez que descubra realmente su fuerza interior todo todo va a cobrar como un rumbo y las cosas irán acomodando”, concluyó la actriz.