Días antes de dejar la presidencia de México, Andrés Manuel López Obrador dio a conocer que no se trasladaría inmediatamente a su rancho “La Chingada”, ubicado en Palenque, Chiapas.
Fue durante la conferencia de prensa del 25 de septiembre que el hoy exmandatario explicó que permanecería unos días en la Ciudad de México para “aclimatarse” antes de mudarse a su finca, un lugar que había prometido sería su residencia tras concluir su mandato.
Sin embargo, de acuerdo con la periodista Anabel Hernández en su podcast Narcosistema, la verdadera razón por la que AMLO ha retrasado su mudanza a Chiapas tiene que ver con el “legado de violencia” que ha dejado en el país.
“Lo que está pasando en Sinaloa es sólo un botón de muestra de este México en llamas que deja Andrés Manuel López Obrador como legado a este país. Es la factura que los ciudadanos debemos de pagar porque aceptó el financiamiento del Cártel de Sinaloa para llegar al poder y ahora quedó en medio de esos dos fuegos”, criticó la periodista.
Esta situación, según Hernández, ha impedido que AMLO cumpla su promesa de retirarse a su rancho debido a la inseguridad que se registra en la región, pues cabe resaltar que actualmente esta entidad al sur de México se encuentra en disputa por dos grupos criminales: el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
“Es tal el nivel de violencia que prevalece en el país que ni siquiera el hoy ex presidente de la República puede cumplir su promesa e irse a vivir a su rancho, La Chingada, en Chiapas, justamente por el nivel de violencia, asesinatos, que hay en la región. Si ni el propio expresidente de la República puede ir a vivir a una de sus propiedades imaginemos cuál es la situación del resto de los ciudadanos, simples mortales, que viven en esa zona”, recalcó.
La investigadora experta en narcotráfico aprovechó también para criticar que AMLO dejara, según ella, un país con finanzas deterioradas, el menor crecimiento en dos décadas, altas tasas de empleo informal y una deuda pública que se duplicó en seis años.
Igualmente aseveró que aunque oficialmente dejó la presidencia el 30 de septiembre, se dice que su influencia continúa a través del Congreso de la Unión y el partido Morena, con su hijo Andrés Manuel López Beltrán desempeñando un papel clave en la política interna del partido.
El futuro de AMLO
“La Chingada” es una propiedad que se encuentra en un entorno natural privilegiado, rodeada de vegetación exuberante y árboles frutales, que ocupa una extensión de aproximadamente 13,341 metros cuadrados.
La finca, según López Obrador, es un legado de sus padres y tiene un profundo valor personal para él. A lo largo de los años, el rancho se ha convertido en un símbolo de su conexión con sus raíces. Durante su tiempo en la presidencia, AMLO mencionó en varias ocasiones su deseo de retirarse a “La Chingada” tras concluir su mandato, expresando su anhelo de volver a un entorno más simple y relajado.
Ahora que concluyó su vida política activa, el tabasqueño planea dedicar su tiempo a la escritura, enfocado en investigaciones históricas. Ha declarado su intención de publicar un libro sobre el pensamiento conservador en México. Además, busca disfrutar de actividades personales como admirar la naturaleza y practicar su deporte favorito, el béisbol.
López Obrador ha expresado que, una vez que se retire de la vida pública, desea que las personas no lo busquen en “La Chingada”. Justificó esta solicitud diciendo que las visitas podrían ser utilizadas por sus adversarios como pretexto para espiarlo.
Cabe mencionar que, de acuerdo con un reportaje de Latinus, el gobierno de lopezobradorista invirtió hasta 2 mil millones de pesos en la remodelación de la zona alrededor de “La Chingada”. Esta inversión incluyó la mejora de vialidades y la construcción de nueva infraestructura, como un cuartel militar y un hospital del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), ubicado a solo cinco minutos del rancho.