Tanto el hígado como los riñones son dos importantes órganos que cumplen funciones vitales en el organismo debido a que son principales encargados de filtrar y depurar todas aquellas sustancias y deshechos que no sirven en el cuerpo.
Es por esto que es de suma importancia mantenerlos en optimo estado de salud, ya que las enfermedades en ellos pueden ser crónicas, dolorosas e incluso mortales, como es el caso de la cirrosis y las insuficiencias renales.
Por suerte, además de llevar una alimentación saludable y evitar hábitos como beber alcohol en exceso o fumar, existen bebidas que pueden tomarse de manera ocasional para facilitar la función de estos órganos y fomentar su depuración.
Este es el caso del té de menta, el cual, aunque muchos no lo saben, tiene importantes beneficios depurativos y desintoxicantes los cuales sin duda serán grandes aliados de tu hígado y riñones y aquí te contamos la razón.
Cuáles son los beneficios del té de menta para la salud del hígado y los riñones
Beneficios para el hígado:
- Acción desintoxicante: La menta contiene compuestos antioxidantes que ayudan a eliminar toxinas del hígado, protegiendo así a las células hepáticas del daño oxidativo y brindando una función depurativa.
- Propiedad antiinflamatoria: Los compuestos presentes en la menta, como el mentol y el rosmarinico, tienen efectos antiinflamatorios que pueden ayudar a reducir la inflamación en el hígado.
- Mejora la función hepática: Algunos estudios sugieren que el té de menta puede mejorar los niveles de enzimas hepáticas y la función general del hígado.
Beneficios para los riñones:
- Efecto diurético: El té de menta tiene propiedades diuréticas que pueden ayudar a aumentar la producción de orina, favoreciendo así la eliminación de toxinas y desechos a través de los riñones que ayudarán a depurarlos.
- Prevención de cálculos renales: Los compuestos antioxidantes y diuréticos de la menta pueden ayudar a prevenir la formación de cálculos renales al promover la eliminación de ácido úrico y otras sustancias que contribuyen a su formación.
- Protección contra el daño oxidativo: Los antioxidantes presentes en la menta, como el mentol y el rosmarinico, pueden proteger a las células renales del daño causado por los radicales libres.
- Efectos antiinflamatorios: Las propiedades antiinflamatorias de la menta pueden ayudar a reducir la inflamación en los riñones, lo que podría ser beneficioso en casos de enfermedades renales.
Es importante destacar que, aunque el té de menta es generalmente seguro, se recomienda moderar su consumo y consultar con un profesional de la salud si se padecen enfermedades previas hepáticas o renales.
Si se desea consumir de manera regular la dosis que se considera segura es de una a dos tazas al día.
En caso de que desees usarlo para depurar de manera ocasional estos órganos puedes tomarlo durante periodos de entre 2 a 3 semanas y posteriormente tomar descansos de algunas semanas o meses.
Siempre recuerda consultar con tu médico sobre posibles contraindicaciones en caso de padecer alguna enfermedad preexistente o esta tomando algún medicamento particular.