“¡Todos pechotierra!”, fue la orden que la directora de una escuela primaria de Culiacán dio a todo el personas educativo y al estudiantado, esto luego de ser notificada de una persecución que ocurría en las inmediaciones de la Universidad Autónoma de Occidente.
En imágenes que circularon en redes sociales se aprecia a los alumnos escondidos bajo las bancas que deberían servir para apoyar sus libros; algunos tendidos pechotierra y otros cubriéndose el rostro ante el temor de la violencia que tiene 16 días azotando a toda la población.
En una entrevista para el Sol de Sinaloa, la directora de la escuela primaria Luis Donaldo Colosio aseguró no haber escuchado un sólo disparo, sin embargo, pro precaución y en atención a la seguridad de los 24 estudiantes dentro de la institución, optó por aplicar el protocolo por balaceras.
La académica agregó que dio parte al servicio de emergencias 911 para que le confirmaran si había o no riesgo, pero nadie acudió al plantel educativo para ayudarlos; sin embargo, contó que padres de familia, maestros, alumnas y alumnos siguieron el protocolo hasta garantizar que todos estuvieran a salvo.
Casi una hora después del reporte, y pese a la implementación del “Operativo de Proximidad en Escuelas”, las autoridades no llegaron al plantel educativo, por lo que la directora optó por suspender las clases y cerrar las puertas de la primaria.
“Esperamos 50 minutos y la patrulla nunca llegó. El plan de proximidad no cumple, estamos exponiéndonos y exponiendo a los niños”, lanzó la directora de la primaria Luis Donaldo Colosio.
¿Qué pasó en Culiacán?
Cuando la escuela primaria ya se encontraba vacía y los niños y niñas habían sido evacuados y entregados a sus madres, sólo entonces, llegaron los elementos de la Policía Municipal para hablar con la directoral del plantel educativo; no sin antes, afirmar ante una reportera (del periódico Noreste) que se encontraba en el lugar, que no había existido reporte alguno.
Pese a los señalamientos de los uniformados, esta mañana sí se reportó una persecución de civiles armados por parte de policías estatales sobre el Boulevard Lola Beltrán, muy cerca de la Universidad Autónoma de Occidente, donde se realizó el levantamiento de varios objetos ponchallantas que provocaron daños en al menos dos vehículos, según reportes locales.
Debido a la persecución registrada durante la mañana -día 16 desde el inicio de los enfrentamientos por la guerra interna entre dos facciones del Cártel de Sinaloa- sumado a la falta de respuesta del “Operativo de Proximidad”, madres y padres de familia exigieron al gobernador Rubén Rocha Moya que se autorice el regreso a clases en línea ante el temor de la inseguridad.
Con una manta que colgaron en una de las bardas del jardín de niños Diana Laura Riojas de Colosio para exigir que no se imponga a las escuelas la obligación para recibir a los estudiantes hasta que se garantice su seguridad y las de los trabajadores.
“Nos negamos a que nuestras hijas e hijos asistan a clases presenciales, hasta que la paz y tranquilidad en Culiacán permitan que existan las condiciones de traslado, ingreso y permanencia en la escuela de forma segura, tanto para ellos como para toda la comunidad escolar”.