Así fue como el salario mínimo aumentó más del 100% en el sexenio de López Obrador

A la llegada de Andrés Manuel López Obrador a la presidencia de México, el salario mínimo en México se situaba en 88.40 pesos, con el cual una persona trabajadora sólo podía cubrir alrededor del 84% del costo de la canasta básica alimentaria, según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).

El aumento real del salario mínimo fue una de las principales tareas del gobierno de López Obrador, quien más allá de los ajustes inflacionarios, impulsó un alza gradual durante su sexenio y con ello devolver a la clase trabajadora el poder adquisitivo.

“El salario mínimo ha aumentado más del 100 % en términos reales, como no había ocurrido en los últimos 40 años”, destacó el mandatario federal durante su último Informe de Gobierno.

Agregó que con esta política logró reducir la brecha de desigualdad en nuestro país, y afirmó que en el periodo de gobierno de Felipe Calderón, una persona de clase alta ganaba en promedio 35 veces más que una de clase baja: “Ahora la diferencia ha disminuido a 15 veces”.

“En 2018, el promedio… en 2018 el salario promedio de los trabajadores inscritos al Seguro Social era de 352 pesos diarios; hoy es de 587 pesos”, presumió AMLO, quien además dejó en el Congreso una reforma para establecer en la Constitución que el aumento anual sea por encima de la inflación.

Durante el gobierno del político tabasqueño, el salario mínimo en México registró incrementos significativos, donde fue necesaria la coordinación entre la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami) y el sector privado:

2019: El salario mínimo se incrementó a 102.68 pesos diarios, lo que representó un aumento del 16.2%.

2020: Subió a 123.22 pesos diarios, un incremento del 20%.

2021: Aumentó a 141.70 pesos diarios, lo que significó un aumento del 15%.

2022: Se elevó a 172.87 pesos diarios, representando un incremento del 22%.

2023: Subió a 207.44 pesos diarios, un aumento del 20%.

2024: En el último año del sexenio se registró un aumento significativo, a 248.93 pesos diarios.

Estos incrementos tienen el objetivo de mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores y reducir las desigualdades salariales en el país.

El aumento del salario mínimo en México ayuda a reducir la pobreza, permitiendo a los trabajadores cubrir mejor sus necesidades básicas, como alimentación, vivienda, salud y educación.

Un incremento en el sueldo, permite a las familias consumir más bienes y servicios, impulsando así la demanda interna y el crecimiento económico.

Como señaló el presidente de la República en su sexto informe, también contribuye a disminuir la brecha de ingresos entre los trabajadores mejor pagados y los de menores ingresos, reduciendo la desigualdad económica y social.

Otro factor importante para la economía, es que un salario mínimo adecuado puede incentivar a los trabajadores a buscar empleo formal, ya que les ofrece mejores condiciones laborales y acceso a prestaciones sociales.

Claudia Sheinbaum Pardo, quien asumirá la presidencia de México el 1 de octubre, tiene el objetivo de que el salario mínimo en México se eleve anualmente en un 11% a lo largo de dos fases, con el objetivo de combatir la pobreza y mejorar el nivel de vida de los trabajadores mexicanos.

El primer paso es que para el año 2026 el salario mínimo alcance al menos el doble del valor de la línea de pobreza por ingresos urbana (LPIU), lo que implicaría alrededor de 9 mil pesos al mes. En una segunda etapa, se espera que para el año 2030 este salario equivalga a 2.5 veces la LPIU, situándose en poco más de 11 mil pesos mensuales.

Este plan de Sheinbaum Pardo se alinea con la política salarial de su predecesor, Andrés Manuel López Obrador, quien también implementó aumentos salariales de dos dígitos durante su administración.

Aunque aún no se han especificado cifras para el próximo año, se anticipa que la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami) prepare un informe definitivo sobre este ajuste salarial, cuyo plazo máximo para entrega está fijado para el 31 de diciembre de 2024. Con la publicación de estas cifras, los nuevos salarios entrarían en vigor a partir del 1 de enero del año siguiente.

Según el documento “100 pasos para la transformación” de Sheinbaum, se consideran necesarias estas subidas salariales para alcanzar las metas sexenales en materia de bienestar.