Sin duda los conciertos que Metallica ha dado en la Ciudad de México han dado mucho de que hablar, no solo debido a la gran producción de su espectáculo, que ha sido reconocido por su calidad y su original escenario 360, sino también por los peculiares covers con los que la banda deleitó a sus fans mexicanos.
Y es que durante su primera presentación la icónica banda sorprendió al público tocando el cover de un clásico de la música, pero no del género del metal sino del género de la música norteña, pues en sus guitarras eléctricas se dejaron escuchar los acordes de La Chona, un clásico de la banda norteña Los Tucanes de Tijuana.
Y aunque hubo muchas reacciones en contra por esta interpretación, pues mucha gente señaló que con una banda de metal no debía prestarse a tocar ese tipo de música, lo cierto es que la mayoría de los asistentes disfrutaron el momento y bailaron al ritmo de esta nueva versión de La Chona.
Y aunque durante su segundo concierto muchos iban con la expectativa de volver a escuchar este cover, la banda volvió a causar sorpresa entre sus fans pues no repitió la canción de la noche anterior sino que interpretaron otro clásico, esta vez del rock en español, al tocar La negra Tomasa, icónica canción que llevó a la fama a Caifanes.
¿Cuál es la historia de la canción La negra Tomasa?
Como se ha podido ver Metallica no solo está tocando covers en español para deleitar a su público sino que está escogiendo canciones que se han convertido en clásicos de bandas mexicanas en español, canciones que sin duda tienen interesantes historias para ser contadas.
Tal es el caso de La negra Tomasa la cual fue la canción que lanzó a la fama a la icónica banda Caifanes, los cuales; sin embargo, no son los creadores originales de la canción pues en realidad se trata de una lírica cubana de 1937 compuesta por Guillermo Rodríguez Fiffe y que posteriormente fue interpretada por varios músicos.
La canción cuenta la historia de Tomasa, una mujer conocida por su carisma y atractivo, que nació en una familia de esclavos pero cuya vida dio un giro significativo cuando los patrones de su madre le heredaron un pedazo de la hacienda donde trabajaba.
Este acto de generosidad permitió a Tomasa utilizar sus recursos para ayudar a mujeres y niños necesitados, compartiendo su espíritu bondadoso con la comunidad razón por la cual cada 15 de agosto, en Cuba, se celebra una festividad en honor a “La Negra Tomasa” como testimonio del impacto que tuvo en la vida de muchas personas vulnerables de su pueblo.
De acuerdo con la historia, la influencia de la negra Tomasa fue tal que, tras su fallecimiento, los habitantes de la región comenzaron a recordar sus buenas acciones y a especular sobre su aparición para conceder milagros. Su legado de bondad y apoyo a los más vulnerables se convirtió en una leyenda que trascendió generaciones.
Lo anterior se debe a que este tipo de música fue prohibida y mal vista durante muchos años, principalmente en la década de los 70; sin embargo, a finales de los 80, con el boom de Caifanes y su versión de la La Negra Tomasa esta música tuvo una oportunidad y comenzó a ser del gusto del público.
Y a pesar de que, desde su origen, esta canción fue tocada por diversos artistas, la versión más conocida fue la realizada por Caifanes, la cual incluyeron en un EP y posteriormente en un álbum donde usaban por primera vez el nombre de Caifanes, pues antes la banda tenía otro nombre,
Y aunque muchos no lo saben, la importancia de esta canción va más allá de que se convirtió en un auténtico éxito, sino que, además, muchos especialistas aseguran que fue la canción, la banda y el álbum que abrieron el camino para el rock mexicano y para bandas que derivaron de él, tales como la Maldita Vecindad o Café Tacuba.
Como mencionamos el éxito de Caifanes y su álbum debut rompió esta barrera. La mezcla de cumbia y post punk en su música, especialmente en La negra Tomasa, atrajo a un amplio público, aunque muchos inicialmente pensaron que Caifanes era una banda de cumbia debido a esta fusión de estilos.