Durante su conferencia de prensa realizada desde la que funge como sui casa de transición, la presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum Pardo, fue cuestionada en torno a la reciente intervención del expresidente Ernesto Zedillo Ponce de León en contra de la reforma al Poder Judicial recién aprobada e impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
La exjefa de Gobierno de la Ciudad de México remarcó que el exmandatario federal está en todo su derecho de opinar; sin embargo, recordó ante la presa que el militante del Partido Revolucionario Institucional (PRI) es un representante del viejo régimen, lo que consideró, parte d lo que está mal para el país.
“Es un representante del viejo régimen, del regimen de corrupción y privilegios y como tal opina”, declaró.
La militante de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), remarcó que, al ser un país democrático, el expresidente estaba en todo su derecho de dar a conocer su postura; no obstante, hizo hincapié en que no estaba de acuerdo con su reciente declaración llevándola a recordarle el tema del Fobaproa.
“Fobaproa pues es el mejor ejemplo el vínculo entre el poder económico y el poder politico porque no solamente fue un rescate bancario, estuvo lleno de corrupción, una deuda que todavía seguimos pagando. Privatización de los ferrocarriles, ¿qué nos dejó la privatización? Nada, se perdió muchísimo”, dijo la morenista.
¿Qué es el Fobaproa?
El Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa) y su manejo durante el mandato del expresidente Ernesto Zedillo es uno de los temas más polémicos en la historia económica reciente de México. Fue creado en 1990 durante la administración de Carlos Salinas de Gortari, como un fondo destinado a proteger el ahorro de los depositantes en los bancos mexicanos en caso de crisis financiera.
Sin embargo, México enfrentó una grave crisis económica a finales de 1994, marcada por una devaluación del peso y una fuga masiva de capitales. La crisis bancaría amenazó la estabilidad del sistema financiero y la economía en general.
Cuando Ernesto Zedillo asumió la presidencia en diciembre de 1994, una de sus prioridades fue estabilizar la economía y rescatar al sistema bancario. En este contexto, el Fobaproa se convirtió en una herramienta crucial para enfrentar la crisis.
Durante 1995 y hasta 1998, el Fobaproa absorbió una gran cantidad de las deudas incobrables y los activos problemáticos de los bancos, utilizando recursos públicos para salvar a las instituciones financieras al borde del colapso.
Ya para 1998, el Fobaproa fue transformado en el Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB), bajo la administración del Congreso de la Unión, con la finalidad de administrar y liquidar los pasivos heredados del rescate del Fobaproa.
Una de las principales críticas es que el rescate bancario fue extremadamente costoso, estimándose en cientos de miles de millones de pesos, deuda que continúa siendo pagada por los contribuyentes mexicanos.
Desde una perspectiva económica, el rescate del Fobaproa es visto por algunos como una medida necesaria para evitar un colapso financiero mayor. Sin embargo, su alto costo y las controversias asociadas han llevado a un debate continuo sobre su impacto y las lecciones aprendidas.
AMLO se burla de Zedillo
Las declaraciones del expresidente de México, Ernesto Zedillo Ponce de León, dieron mucho de qué hablar, pues se lanzó contra la reforma al Poder Judicial y declaró que su aprobación “destruirá la democracia”.
Lo que ocurre es que el priista insistió en que la desesperación de AMLO de no contar con una corte sumisa se ha transformado en “una venganza brutal”. Por ello, esta mañana el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, criticó a Ernesto Zedillo y reiteró que sus declaraciones son “ridículas”.
“Vienen y traen a Zedillo, ¿no? A decir que ya hay una dictadura en México. Es de risa, sí, es de risa, hacen el ridículo, pero no pasa de ahí. No llama a que se lleve a cabo una huelga de pago de impuestos, por ejemplo, si le hicieran caso, a lo mejor pudiera causar algún problema, una disminución en la recaudación y eso nos afectaría, pero no, actúa en ese sentido de manera responsable”, dijo el mandatario entre risas.