Un total de quince personas, entre mexicanas y ecuatorianas, fueron vinculadas a proceso por un juez federal por su probable responsabilidad en delitos de contra la salud en la modalidad de transporte de clorhidrato de cocaína y transporte de petrolífero, ambos con agravante de pandilla, luego de ser detenidos en alta mar por elementos de la Secretaría de Marina (Semar) en el mes de agosto y tras una persecución.
Estas personas, según la Fiscalía General de la República (FGR), navegaban en tres embarcaciones menores con motores fuera de borda sin matrícula, documentación, nombre, bandera ni luminarias, al suroeste de Manzanillo, Colima.
El personal de la Semar observó a estos narcotraficantes cuando pasaban bultos de color negro, amarillo y rosa de una embarcación a otra. Una vez que se vieron descubiertos por la autoridad, todos subieron a una de las lanchas para intentar escapar y arrojaron parte de su cargamento al mar.
Mientras marinos resguardaron dos de los navíos, inició la persecución de los 15 hombres que duró aproximadamente una hora, hasta que fueron detenidos; al realizar una inspección, se aseguraron dos cubitanques, 23 bidones con petrolífero (gasolina regular), 39 bidones vacíos, 126 bultos que tras realizar y tener el resultado del dictamen final para determinar el peso exacto, resultó en cuatro toneladas 931.70 kilogramos de cocaína, y tres embarcaciones menores con motores fuera de borda.
Posteriormente, el Ministerio Público de la Federación (MPF), presentó datos de prueba que resultaron contundentes para que el Juez de Distrito vinculara a proceso a estas personas por los delitos mencionados, con la medida cautelar de prisión preventiva justificada en el Centro de Reinserción Social de Colima y tres meses para la investigación complementaria.
La Marina informó en un primer momento que esta incautación representaba la mayor incautación en un solo evento durante la presente administración.
¿Qué grupo criminal opera en Colima?
Cabe recordar que en la última Evaluación Nacional de la Amenaza de las Drogas 2024, de la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos, se informó que en los Puertos de Manzanillo operan las dos organizaciones criminales más grandes de México: Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Sinaloa.
Los puertos marítimos son una puerta de salida de droga y una de acceso de los precursores químicos, provenientes de China, para de ambas organizaciones criminales, con la cual se elaboran las drogas sintéticas.
La DEA asegura que el CJNG, liderado por Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, controla al menos cuatro puertos para el envío de drogas a otros países: Manzanillo y Lázaro Cárdenas, en costa del Pacífico. Mientras que en el Atlántico y el Golfo de México son en los puertos de Veracruz y Matamoros.
“El cártel utiliza el soborno, la intimidación y la extorsión a funcionarios gubernamentales y portuarios privados para garantizar la seguridad y la entrega de sus envíos de precursores químicos de metanfetamina desde China y de cocaína desde Colombia, Perú y Bolivia”, explica el Informe.
La agencia antidrogas estadounidense destaca que en el puerto de Matamoros, su cercanía con los EEUU, le permite al CJNG y a otros grupos criminales hacer un cobro piso por su uso de traficar estupefacientes de manera más fácil y rápida.
“El Puerto de Manzanillo está ubicado justo al sur del bastión del rival Cártel de Jalisco, lo que aumenta las tensiones entre los dos principales cárteles mexicanos. Numerosas empresas de transporte cómplices trabajan con el Cártel de Sinaloa para transportar drogas ilícitas y precursores químicos desde los puertos hasta la Ciudad de México y otros lugares del interior”, señaló en la evaluación la DEA.