Luego de comenzar con un “precopeo” y hacer la “vaquita” para después comenzar a “chupar” echarse varios “hidalgos” y pretender irnos a descansar, no sin antes una “caminera” y luego la “banquetera”, al otro día llega la “cruda”, esa “cruz” que no nos deja salir adelante al otro día tras haber tenido algún festejo o pretexto para echar trago; el mes patrio se presta para ello.

Cansancio, debilidad, sed, dolor de cabeza, dolor muscular, náusea, dolor de estómago, vértigo, sensibilidad a la luz y al ruido, ansiedad, irritabilidad, sudor y presión arterial alta son síntomas inequívocos de algo llamado resaca, los cuales varían según la persona, pueden presentarse todos o alguno de ellos.

La resaca afecta la atención, toma de decisiones y coordinación muscular de las personas, por lo que conducir u operar maquinaria puede

• Deshidratación.
• Desequilibrio de electrolitos.
• Abstinencia alcohólica.
• Azúcar baja en la sangre.
• Estómago e intestinos inflamados.
• Alteración del sueño.

- Beber café bien cargado.

- Bañarse con agua fría o caliente.

- Beber una cerveza fría por la mañana.

- Un buen menudo o pancita.

- Comer picante para sacar la “cruz”.

- Tomar una bebida endulzada (refresco).

- Ingerir aspirinas, ibuprofeno o naproxeno ayuda.

- Beber un suero o bebidas isotónicas.

- Comer nueces o semillas.

- Cantidad y tipo de alcohol ingerido.

- Sexo y edad.

- Tipo de cuerpo.

- Factores biológicos.

- Diferencias de personalidad.

Tomar con moderación. Se puede garantizar una resaca más leve si se ingiere menos alcohol.

Evitar bebidas congéneres. Se refiere a que las bebidas de colores oscuros como el whisky o el coñac provocan más resaca que aquellas como el vodka, ron y ginebra, bajas en congéneres. Los congéneres son químicos naturales que irritan los vasos sanguíneos y el tejido cerebral.

Dormir suficiente. El alcohol afecta la calidad de sueño, dormir más puede ayudar a reducirla.

Mantenerse hidratado. Tomar agua mientras se toma alcohol puede ayudar a contrarrestar los efectos diuréticos del alcohol para reducir la deshidratación.

Comer antes de tomar. Los alimentos reducen la cantidad de tiempo que le toma al alcohol entrar al torrente sanguíneo, manteniendo bajos los niveles de alcohol en la sangre.

Los licores más oscuros, como el brandy, el vino tinto, el ron o el whisky, tienen una mayor concentración de congéneres que los más claros, como la ginebra o el vodka. Estudios realizados en el centro para el Estudio del Alcohol y la adicción de la Universidad de Brown, Estados Unidos reportan que “las bebidas con un contenido de congéneres más alto producen síntomas de resaca más severos”.