La llave inglesa, también conocida como llave de tuerca, es una herramienta hecha de metal que cuenta con una mandíbula ajustable, principal diferencia con las llaves normales de tamaño fijo.
Es considerada una herramienta de mano y para evitar accidentes se sugiere utilizar guantes para disminuir el riesgo de caídas del artefacto, ya que al ser pesado puede causar golpes fuertes.
“La llave inglesa consta de un mango de acero y una mordaza en la parte superior que se mueve gracias a un tornillo denominado «sinfín». Según se gira el tornillo, una de las partes de la mordaza se mueve hacia un lado para hacer el hueco más grande o hacia el otro aproximándose a la otra parte de la mordaza y, por tanto, quedando el hueco más pequeño. En la mayoría de los modelos de llaves inglesas la parte inferior de la boca cuenta con una zona dentada para una mayor sujeción”, señala el portal de internet de Hogar Mapfre.
Los accidentes con estas herramientas suceden porque la llave se escapa del punto de operación y el esfuerzo que se hace sobre ella queda interrumpido de manera abrupta, produciendo un golpe, que además de ser posible un accidente, puede alterar la forma de la herramienta.
Entre las alteraciones que puede sufrir el artefacto está la deformación en la boca o desgaste, los elementos de regulación pueden verse deteriorados y sueltos o faltos de engrase, por lo que después de utilizarla se sugiere limpiarla, según lo que comparte la Federación Regional de Empresarios del Metal de Murcia.
Consejos para usar la llave inglesa
- Ajustar bien la llave: Para asegurar el mejor contacto entre la tuerca y las mandíbulas de la llave, se debe cerciorar de que las caras opuestas de la herramienta estén paralelas a las de la tuerca para ajustar el tornillo sinfín hasta hacer desaparecer la holgura.
- Sentido de giro: la presión se aplica con la mandíbula fija: El sentido de giro de la llave inglesa importa por lo que se aconseja hacer presión con la mandíbula para minimizar el riesgo de que la boca móvil se abra durante la operación.
- No empujes la llave inglesa, tira de ella: Al colocar la llave inglesa, debe hacerse de modo que se tire del mango, nunca empujando, ya que para aflojar la tuerca se evita un posible daño en los nudillos en caso de que se pierda el control de la herramienta.
- No la golpees con el martillo: Si se necesita golpear con el martillo porque está muy apretada la tuerca, se está utilizando una llave que no es para eso; la herramienta que se puede martillar es la llave de golpe de anillo. Se aconseja utilizar una llave más larga.
- No prolongues el mango de la llave inglesa con un tubo hueco: Se suele recurrir a los tubos para deslizarse en el hueco del mango pero eso puede causar lesiones y accidentes, además de que puede dañar el mango de la llave.
- Usa herramientas de buena calidad: No se sugiere sólo por ahorrar dinero, sino que también una buena llave ofrece un ajuste más preciso y resulta más segura de utilizar.
- Mantén limpia y seca la llave inglesa: Se evitarán caídas si se engrasan los puntos de contacto de las partes móviles y se seca el exceso de la grasa.
- No uses la llave inglesa como martillo: Puede hacerse en caso de que sea una llave inglesa multifuncional, pues cuenta con una estructura reforzada y una zona plana en la cabeza que se hizo especialmente para golpear.
- Adopta una postura corporal correcta: En caso de que la llave se rompa del tornillo, la tensión acumulada puede causar pérdida del equilibrio, por lo que se sugiere tener una postura firme para evitar riesgos de caída. Otro consejo es colocarse fuera de la trayectoria posible de la llave cuando se ocupan a una altura arriba de la cabeza.
- Rechaza la herramienta si está en mal estado: Por seguridad, las llaves inglesas cuyas bocas están desalineadas, desgastadas o deformadas, deben descartarse. Lo mismo debe hacerse si el mango está doblado, tiene áreas dañadas o faltan trozos de metal.
- Usa guantes: Se recomienda el uso de guantes de protección mecánica al momento de ocupar la llave inglesa, esto para disminuir la fuerza de los impactos en caso de golpe o caída de la herramienta.
Tips de la norma oficial
Para saber si resisten los impactos, puede revisarse en la parte inferior la nomenclatura. En caso de desconocerla, se puede consultar la NMX-S-060/1-SCFI-2008, que es la Norma oficial Mexicana que establece los requisitos, métodos de prueba y marcado para la calificación por niveles de desempeño de los guantes o cualquier otra denominación destinados a brindar protección a las manos contra riesgos mecánicos de abrasión, corte, perforación y desgarre.
Los métodos de prueba desarrollados en esta Norma pueden aplicarse también a los protectores de brazo que sean equipos de protección independientes del guante o de la ropa.