En los últimos tiempos, todas las situaciones referente a las estaciones del año, el clima, son cada vez más complicadas de predecir, ya que situaciones como la contaminación ambiental y el cambio climático han influido de tal manera, que en un mismo día podemos tener varios de ellos combinados: frío, calor, lluvias, fuertes vientos y truenos, más lo que se acumule.

Algunos de estos factores pueden ser, unos más que otros, riesgosos para la ciudadanía como pueden ser los truenos, inundaciones o las nubes embudo como ocurrió recientemente con los habitantes de Tepic, Nayarit; Piedras Negras, Coahuila; y Toluca, Estado de México, en el occidente, norte y centro del país, respectivamente, quienes padecieron sus embates.

Estas nubes forman parte de los fenómenos meteorológicos extremos que pueden causar daños en localidades o ciudades y afectar a poblaciones enteras.

Los embudos de aire frío, nubes embudo, funil o cauda como coloquialmente se les conoce, son tornados pequeños y relativamente débiles que pueden originarse a part ir de un chubasco o tormenta cuando el aire en altitud es inusualmente frío, refiere la Organización Meteorológica Mundial (OMM).

Son tornados de Categoría III, más comunes en otoño y primavera, cuando el sol es capaz de calentar los niveles más bajos de la atmósfera, provocando que los vapores burbujeen y se formen lluvias.

Si bien los embudos suelen ser inofensivos, pero ocasionalmente pueden descender, tocar tierra y causar daños catastróficos. Sin embargo, no todas evolucionan en tornados; algunas se disipan antes de tocar la superficie.

Una nube embudo es una columna rotativa de aire visible que se extiende desde una nube de tormenta hacia el suelo sin llegar a tocarlo, su estudio es vital para la predicción y prevención de desastres naturales asociados.

En caso de notar una nube de su tipo realiza las siguientes acciones para resguardar y preservar la vida y la de los tuyos:

• Monitorea la situación.
• Busca refugio inmediatamente.
• Protégete en el refugio.
• Evita estar al aire libre.
• Evita permanecer en vehículos o casas móviles.
• Ante desastres, planifica con anticipación.
• Permanece en el refugio hasta el aviso de las autoridades.