El Cártel de Sinaloa es uno de los dos grupos criminales en la mira de la Agencia para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), pues en su reporte más reciente la institución antidrogas menciona que dicha estructura delictiva y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) son las que han acaparado el negocio de los narcóticos.
Las autoridades estadounidenses indican que el Cártel de Sinaloa fue creado por tres personas durante la década de 1990: Joaquín El Chapo Guzmán, Ismael El Mayo Zambada (ambos actualmente bajo custodia de las autoridades estadounidenses) y Juan José Esparragoza, alias El Azul, presuntamente asesinado hace 10 años.
Dichos sujetos son importantes debido a que, al menos hasta el año 2014, se mantenían relativamente estables, hasta que sucedido el segundo arresto del Chapo. En un documento judicial del Distrito Sur de Nueva York se pueden leer las acusaciones en contra de 23 personas ligadas al grupo criminal y el que también es mencionada una reunión en la que la estructura criminal buscaba organizarse.
Captura y fuga del Chapo
Cabe recordar que para el año 2008 El Chapo fue identificado como el líder “más poderoso” del Cártel del Pacífico, además de que en dicho año también hubo una ruptura con los Beltrán Leyva, lo anterior provocó un ambiente de violencia en el norte del país.
Pero pasaron seis años para que el Joaquín Guzmán Loera fuera detenido por las autoridades mexicanas, se trata de la segunda ocasión en la que era capturado a través de la denominada Operación Gárgola, en la cual participaron elementos de la Secretaría de Marina (Semar).
Sin embargo, para el año 2015, Guzmán Loera logró evadir a las autoridades del penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México. La captura y posterior fuga del Chapo provocó que figuras importantes dentro del grupo criminal asistieron a una reunión.
La reunión para decidir el futuro del Cártel de Sinaloa
Los registros judiciales indican que cuando Guzmán Loera todavía estaba bajo supervisión de las autoridades mexicanas hubo una reunión con el objetivo de planificar el futuro del grupo criminal.
El Chapo Guzmán tiene cuatro hijos, quienes son acusados actualmente de trasiego de fentanilo. Se trata de Joaquín Guzmán López, Ovidio Guzmán López, (ambos bajo custodia de las autoridades estadounidenses), Iván Archivaldo Guzmán Salazar y Jesús Alfredo Guzmán Salazar (quienes siguen en libertad), identificados como los líderes de Los Chapitos.
Fue en un rancho propiedad de Iván Archivaldo que fue desarrollada la reunión, según recoge el documento, el sitio no es ubicado con precisión y únicamente llegaron tres de Los Chapitos, sin que se conozca quién fue el hermano ausente.
Lo que sí registran las autoridades es que en el sitio estuvieron integrantes relevantes del Cártel de Sinaloa y parte de lo acordado fue la distribución de plazas, es decir los territorios controlados por cabecillas del grupo criminal.
“Asistieron los líderes de las facciones del Cartel, incluidos los herederos aparentes de los miembros del Cartel leales a El Chapo: tres de sus hijos conocidos como los “Chapitos”. Durante esta reunión, los Chapitos y los líderes de las otras facciones importantes del Cartel discutieron el futuro del Cartel y asignaron el control de las distintas regiones de México o “plazas” a los presentes”, se puede leer.
Los territorios denominados plazas son tan relevantes que incluso el pasado mes de abril las autoridades de EEUU informaron sobre la Operación Plaza Spike, la cual busca afectar a los grupos criminales a través de la captura de “jefes de plaza”.
Y es que actualmente Los Chapitos son identificados como los responsables de una cantidad importante del opioide que llega a territorio norteamericano. La captura de Ismael Zambada y de Joaquín Guzmán López, las cuales se suman a la captura de Ovidio en EEUU perfilan un cambio dentro del Cártel de Sinaloa, según señalan algunos especialistas.
Hasta el pasado mes de mayo la DEA identificaba que el Cártel de Sinaloa no contaba con un único líder, sino que operaba bajo un “esquema paraguas”, el cual agrupaba cuatro facciones: la liderada por Rafael Caro Quintero, otra por Aureliano Guzmán, otra más por Los Chapitos y la última comandada por El Mayo.
Dos de Los Chapitos enfrentan la justicia en EEUU, al igual que Ismael Zambada, Caro Quintero se encuentra recluido, razones por las cuales hay reportes de que es el fin del Cártel de Sinaloa, como lo expresó el periodista Jesús Lemus, los cuales contrastan con las consideraciones del también periodista José Reveles, ambos entrevistados por Infobae México.