Qué es la poco conocida grasa marrón, cómo se activa y por qué es vital para perder peso

Es probable que no hayas escuchado hablar de ella antes, ya que se trata de un término relativamente nuevo que poco a poco se da a conocer, pero la grasa marrón, también conocida como tejido adiposo marrón, es un tipo de grasa presente en el cuerpo que consume energía en lugar de almacenarla, a diferencia de la grasa blanca.

Su función principal es generar calor mediante un proceso llamado termogénesis por lo que su existencia es sumamente importante para la pérdida de peso, debido a su enorme capacidad de quemar calorías.

Al activarse, especialmente en ambientes fríos, la grasa marrón incrementa el gasto energético del cuerpo, lo que contribuye a la reducción de grasa corporal y, por ende, a la pérdida de peso.

Investigaciones recientes sugieren que estimular la actividad de la grasa marrón podría ser una estrategia efectiva para combatir la obesidad y otros trastornos metabólicos ya que entre más porcentaje tenga un cuerpo de esta grasa más fácil le es quemar las calorías ingeridas durante el día.

Activar la grasa marrón, o tejido adiposo marrón, puede ser beneficioso para incrementar el gasto energético y contribuir a la pérdida de peso. Aquí te presentamos algunas estrategias respaldadas por investigaciones científicas para activar esta grasa.

• Exposición al frío: Uno de los métodos más eficaces para activar la grasa marrón es la exposición a temperaturas frías. Estudios demuestran que pasar tiempo en ambientes fríos puede estimular la termogénesis. Prácticas como tomar duchas frías, usar compresas frías o incluso pasar tiempo en habitaciones más frescas pueden ser efectivas.
• Ejercicio: El ejercicio regular no solo quema calorías directamente, sino que también puede activar de manera indirecta la grasa marrón. Durante el ejercicio, el cuerpo libera una hormona llamada irisina, que se ha demostrado que activa la grasa marrón. Incorporar entrenamientos aeróbicos y de resistencia en tu rutina puede ser beneficioso.
• Alimentación: Algunos estudios sugieren que ciertos alimentos y nutrientes pueden activar la grasa marrón. Por ejemplo, la capsaicina, presente en los chiles picantes, y las catequinas del té verde podrían tener este efecto. Incluir alimentos que contengan estos compuestos en tu dieta puede ayudar.
• Sueño y ritmo circadiano: Mantener un ritmo de sueño saludable también puede influir. La melatonina, una hormona que regula el sueño, puede tener un papel en la activación de la grasa marrón. Asegurarte de tener una buena higiene del sueño y dormir entre 7-9 horas por noche es crucial.
• Suplementos y Fármacos: Algunas investigaciones están explorando el uso de ciertos fármacos y suplementos para activar la grasa marrón. Sin embargo, estos métodos están aún en fases experimentales y deben ser supervisados por un profesional de la salud.

• Sedentarismo La falta de actividad física contribuye a la reducción de la grasa marrón. El ejercicio regular promueve la activación y el mantenimiento de esta grasa, por lo que un estilo de vida sedentario puede tener efectos negativos.
• Envejecimiento Con la edad, la cantidad y la actividad de la grasa marrón tienden a disminuir. Este proceso es natural y puede contribuir a un metabolismo más lento en la edad avanzada.
• Alimentación no equilibrada Dietas altas en grasas saturadas y azúcares simples pueden afectar negativamente la cantidad de grasa marrón. Asegurarse de seguir una dieta equilibrada y rica en nutrientes es clave para su mantenimiento.
• Estrés crónico Niveles elevados de estrés y la producción constante de cortisol pueden impactar negativamente la grasa marrón. Técnicas de gestión del estrés, como la meditación o el yoga, pueden ser beneficiosas.