El fin de semana pasado, el Gobierno de Japón emitió un comunicado alertando sobre la posibilidad de un megaterremoto de magnitud 9.0 generando preocupación entre los residentes. La tiktoker mexicana y profesora de idiomas, Zuleiza, compartió su experiencia en un video viral, mostrando cómo se prepara para esta eventualidad.
“Gente pues este fin de semana, el Gobierno de Japón ha emitido un comunicado de megaterremoto magnitud 9 y la verdad es que últimamente ha estado temblando un buen desde el sismo del 7.1 que fue al sur de Japón, nos ha estado temblando todos los días básicamente”, comentó Zuleiza en su video.
Zuleiza, quien reside en Japón, detalló cómo el gobierno instó a la población a preparar mochilas de emergencia. “El gobierno nos dijo que pues preparamos nuestras mochilas, yo la verdad nunca había pasado por eso, pero en fin hay que darle”, explicó mientras mostraba cómo metía medicinas, ropa, productos de aseo, y su pasaporte en una mochila.
La influencer admitió que no estaba preocupada hasta que los sismos comenzaron a ser una constante diaria. “La verdad no estaba preocupada hasta que nos empezó a preocupar casi diario. Y pues ahora a esperar y que dios se apeade de nosotros”, concluyó.
El pasado jueves 8 de agosto, un terremoto de magnitud 7.1 sacudió la isla de Kyushu, en el sur de Japón, activando las alertas. El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) emitió una advertencia por riesgo de tsunami.
La Agencia Japonesa de Meteorología (JMA) también emitió una advertencia de tsunami, instando a la población a mantenerse alejados del mar y la costa. “Por favor, no entre en el mar ni se acerque a la costa hasta que se levante el alerta”, reportó la institución a través de Twitter/X. Posteriormente, se registraron olas de 50, 20 y 10 centímetros en diferentes localidades.
Japón, ubicado en el Cinturón de Fuego del Pacífico, es uno de los países con mayor actividad sísmica del mundo, registrando alrededor de 1,500 sismos anuales, lo que representa el 18% de los temblores a nivel mundial. A pesar de la alta actividad sísmica, las estrictas normas de construcción antisísmica han permitido minimizar las consecuencias graves.