Cuál es el efecto del ginkgo biloba en el hígado y los riñones

Como es sabido, el ginkgo biloba es un árbol originario de China, conocido por su longevidad y sus hojas distintivas en forma de abanico.

Es una de las especies de árboles más antiguas del mundo, con una historia que se remonta a más de 200 millones de años y con sus hojas se elaboran suplementos de ginkgo biloba que se usan con diferentes fines medicinales, los cuales se le atribuyen a los siguientes compuestos:

• Flavonoides: Potentes antioxidantes que ayudan a proteger las células del daño causado por los radicales libres.
• Terpenoides: Incluyen ginkgólidos y bilobálidos, que tienen efectos antiinflamatorios y vasodilatadores.

Sin embargo, a pesar de sus numerosos beneficios, es importante tener precauciones con su consumo, debido a que, sino se toma en la dosis adecuadas, puede tener efectos contraproducentes, sobre todo en órganos como el hígado y los riñones, sobre los que te contamos a continuación.

El ginkgo biloba es una planta tradicionalmente utilizada por sus posibles beneficios para la salud, sin embargo, como con cualquier suplemento, es importante considerar sus posibles efectos secundarios, especialmente en órganos vitales como el hígado y los riñones.

• Hepatotoxicidad:
  Aunque es poco común, ha habido reportes anecdóticos de daño hepático asociado con el uso de ginkgo biloba. La hepatotoxicidad puede manifestarse en forma de elevación de las enzimas hepáticas, ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos) y daño hepático agudo.
• Interacciones con otros medicamentos:
  El ginkgo puede interactuar con medicamentos metabolizados por el hígado, potencialmente alterando su efectividad y aumentando el riesgo de efectos adversos. Por ejemplo, puede interferir con el metabolismo de ciertos antidepresivos, anticoagulantes y anticonvulsivantes.
• Alergias y sensibilidades:
  Algunas personas pueden ser alérgicas o sensibles a los componentes del ginkgo, lo que podría resultar en reacciones hepáticas adversas.

• Riesgo renal: Hay evidencia limitada sobre los efectos del ginkgo biloba directamente en los riñones. Sin embargo, algunos estudios en animales han indicado posibles daños renales con dosis muy altas, aunque estos efectos no se han confirmado en humanos.
• Interacciones con medicamentos nefrotóxicos: Similar al hígado, el ginkgo puede interactuar con medicamentos que son potencialmente perjudiciales para los riñones, exacerbando sus efectos tóxicos y aumentando el riesgo de daño renal.
• Alergias y sensibilidades: Las reacciones alérgicas pueden afectar múltiples órganos, incluidos los riñones. En casos raros, una reacción alérgica grave podría causar inflamación renal o empeorar las condiciones renales preexistentes.

Si se toma con precaución, bajo supervisión médica y en dosis adecuadas, los siguientes son algunos de los beneficios que tiene el consumo de este suplemento:

• Mejora de la función cognitiva: Se cree que el Ginkgo biloba mejora la memoria y las funciones cognitivas. Es utilizado comúnmente para tratar o prevenir trastornos cognitivos como la demencia y el Alzheimer.
• Mejora de la circulación: Ayuda a mejorar el flujo sanguíneo, especialmente en las extremidades. Esto es beneficioso para personas con problemas circulatorios como claudicación intermitente y síndrome de Raynaud.
• Efectos antioxidantes: Los flavonoides del Ginkgo biloba actúan como antioxidantes, protegiendo las células del daño oxidativo y reduciendo el riesgo de enfermedades crónicas.
• Reducción de la ansiedad y el estrés: Se ha sugerido que puede tener efectos ansiolíticos, ayudando a reducir los niveles de estrés y ansiedad.
• Salud ocular: Algunos estudios indican que puede mejorar la salud ocular y ayudar en condiciones como el glaucoma y la degeneración macular.
• Tinnitus (zumbido en los oídos): Recientemente ha comenzado a usurarse para tratar de aliviar los síntomas del tinnitus, aunque aún se realizan estudios sobre este efecto.

• Consulta médica: Siempre es recomendable hablar con un profesional de salud antes de comenzar cualquier suplemento, especialmente si ya se tienen condiciones hepáticas o renales, o si se están tomando otros medicamentos.
• Dosis apropiada: Seguir las indicaciones de dosificación es crucial para minimizar el riesgo de efectos adversos. No exceder las dosis recomendadas sin la supervisión de un médico.
• Monitoreo de la salud: Si se experimentan síntomas como fatiga extrema, coloración amarillenta de la piel (ictericia), orina oscura o molestias abdominales, es fundamental buscar atención médica inmediatamente.