Tres miembros de una familia wixárica son golpeados y desaparecidos cuando salieron a trabajar en Zacatecas

Se trata de Julio García Carrillo junto a sus hijos Adrián y César García de la Cruz, de 18 y 24 años, quienes son originarios de Jalisco

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Los tres hombres son originarios de Jalisco, pero acudieron a Zacatecas a trabajar. (FGJ Zacatecas)
Los tres hombres son originarios de Jalisco, pero acudieron a Zacatecas a trabajar. (FGJ Zacatecas)

Tres hombres, integrantes de una familia wixárica de la comunidad de Santa Catarina Cuxcomatitlán, en el municipio de Mezquitic, Jalisco, desaparecieron el pasado 13 de julio en la comunidad de Toribio, en el municipio de Calera, en Zacatecas, lugar al que acudieron a trabajar en la pizca de jitomate.

Reportes señalan que sujetos armados ingresaron al lugar en el que se alojaban Julio García Carrillo junto a sus hijos Adrián y César García de la Cruz, de 18 y 24 años para sacarlos por la fuerza y llevárselos.

Los tres se reunieron en Toribio como cada verano lo hacen decenas de personas en Santa Catarina para trabajar como jornaleros. El pasado nueve de julio, el padre arribó al lugar. Al día siguiente, el 10 de julio, llegó el hijo menor y luego el mayor, quien recientemente había terminado de cursar el cuarto semestre en el Bachillerato Tamaatsi Paritsika, una escuela autónoma sostenida por la comunidad de Santa Catarina.

Se hospedaron en una casa que rentaron junto a otros jornaleros y según lo declarado por algunos testimonios, cerca de la 1:00 hrs del 13 de julio, siete sujetos armados, algunos vestidos de negro y otros con ropa militar, entraron a la casa y comenzaron a golpear a Adrián, por lo que su padre y su hermano trataron de defenderlo, sin embargo, también los comenzaron a golpear a ellos.

Los jóvenes y su padre acudieron a Chihuahua a trabajar en pizca de jitomates. (Foto: Pixabay)
Los jóvenes y su padre acudieron a Chihuahua a trabajar en pizca de jitomates. (Foto: Pixabay)

Según los testigos, los estuvieron golpeando por cerca de 50 minutos, para después llevárselos a los tres en camionetas.

Del hecho se enteró el abuelo de Adrián y César, quien vive en una pequeña ranchería, ubicada en la sierra wixárica, en el estado de Jalisco. Para cuando el abuelo de los jóvenes logrói llegar a la ciudad de Fresnillo, en Zacatecas, para interponer la denuncia, ya habían pasado tres días.

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