Las carnitas son uno de los platillos más icónicos de México, preparadas de diferente forma en cada región del país y forman parte de la cultura gastronómica de lugares como la Ciudad de México. Esta deliciosa preparación se come en todo el mundo pero sólo en nuestro país se pueden probar los sabores más auténticos y ricos.
La gastronomía mexicana es patrimonio cultural de la humanidad por parte de la UNESCO y de ahí que millones de extranjeros viajen kilómetros hasta acá para probar nuestros platos, incluidas por supuesto, las carnitas.
Los mexicanos están de acuerdo: las carnitas son de las preparaciones más ricas de todo el paí. Pero, ¿qué piensan los comensales de todo el mundo? Taste Atlas, la popular enciclopedia gastronómica que califica la cocina de varios países del mundo, tiene una respuesta respecto a las carnitas.
Esto opina Taste Atlas de las populares carnitas: “Originarias del estado mexicano de Michoacán, las carnitas son un platillo sabroso elaborado con carne de cerdo (generalmente secciones frontales o paleta de cerdo) que se estofa, se asa o se cocina a fuego lento en su propia grasa durante mucho tiempo hasta que esté completamente tierna y suculenta”.
Y añade: “Luego se sube el fuego hasta que la carne esté crujiente por fuera y se pueda desmenuzar. Las carnitas a menudo se sirven con tortillas, acompañadas de salsas, frijoles, guacamole, limón o verduras frescas. En Michoacán, las carnitas se encuentran en todas partes, desde puestos callejeros hasta restaurantes de lujo, aunque el platillo se prepara más a menudo para ocasiones especiales como Navidad, aniversarios o cumpleaños”.
Taste Atlas le da a las carnitas la calificación de 4.6 estrellas de 5. Cabe mencionar, que quienes califican los platillos son expertos de todo el mundo.
Más sobre las carnitas mexicanas
Las carnitas tienen un origen profundamente arraigado en la cultura culinaria de México, particularmente en el estado de Michoacán, considerado cuna de esta tradición gastronómica. Se cree que las carnitas surgieron con la llegada de los españoles en el siglo XVI, quienes introdujeron el cerdo a la dieta mexicana. Desde entonces, esta preparación se ha convertido en un símbolo de la cocina mexicana.
Las carnitas son trozos de carne de cerdo cocidos en su propia grasa (manteca) a fuego lento y durante varias horas hasta que se tornan tiernos y jugosos. Este método de cocción tradicionalmente se lleva a cabo en grandes cazos de cobre, lo cual según los expertos, ayuda a distribuir el calor de manera uniforme y a conferir un sabor característico a la carne.
Existen diversas formas de preparación y cada región de México puede tener su propia variante. Las más comunes incluyen la cocción de la carne con ingredientes como sal, ajo, naranja, laurel y cerveza, que aportan una gama de sabores únicos. En algunos lugares, las carnitas se aromatizan con hierbas y especias adicionales como clavo, canela y pimiento, lo que le da un toque distintivo.
Su importancia para México va más allá del simple acto de comer. Las carnitas son un elemento central en celebraciones familiares, eventos comunitarios y festividades nacionales. Frecuentemente se disfrutan en tacos, acompañadas con salsa, cebolla, cilantro, rábano y limones, componiendo un plato básico en la gastronomía mexicana.
Además, el comercio de carnitas representa una fuente de ingresos significativa para muchos emprendedores y pequeñas empresas, especialmente en mercados y tianguis. Este platillo, por lo tanto, refleja tanto la riqueza cultural y gastronómica de México como su capacidad de generar sustento económico para muchas familias.