Cuánto cuesta una tumba en Jardines del Humaya, el “panteón de los narcos” en Culiacán, Sinaloa

En este cementerio descansan los restos de muchos capos del narcotráfico, por lo que las residencias de lujo para el descanso eterno no son sorpresa

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Aquí yacen los restos de
Aquí yacen los restos de capos como Ignacio Nacho Coronel, Arturo Beltrán Leyva; familiares y sicarios que trabajaron para Joaquín El Chapo Guzmán e Ismael El Mayo Zambada, Rafael Caro Quintero o El Güero Palma, entre muchos otros. FOTO: JUAN CARLOS CRUZ /CUARTOSCURO.COM

En el corazón de Culiacán, Sinaloa, se encuentra Jardines del Humaya, un cementerio que ha capturado la atención nacional en diversas ocasiones por su inusual lujo y peculiar clientela. Conocido comúnmente como el “panteón de los narcos”, este sitio no es un camposanto común.

Sus mausoleos y tumbas ostentan una opulencia que contrasta drásticamente con las modestas viviendas de los alrededores. Se trata de monumentos de extravagancia y poder, muchas veces más similares a residencias de lujo que a lugares de descanso eterno.

Estos mausoleos están construidos con mármol importado, vitrales decorativos, sistemas de aire acondicionado, numerosos pisos, WiFi, televisión satelital y hasta salones de fiestas. Algunas incluso cuentan con salas de estar, dormitorios, cocinas y sistemas de vigilancia, reflejando una muestra de poder y riqueza que busca dejar una impresión duradera.

Jardines del Humaya
Jardines del Humaya

El cementerio es el lugar de descanso final para muchos capos del narcotráfico y otros personajes asociados con el crimen organizado en México. Uno de los nombres más notorios es el de Arturo Beltrán Leyva, líder del Cártel Beltrán Leyva y mejor conocido por sus alias de “El Barbas” o “El Jefe de Jefes”, cuya tumba es una de las más lujosas, con acabados en mármol y un sistema de sonido que reproduce música de banda las 24 horas del día. Se dice que su tumba tiene un costo de 13 millones de pesos.

Sin embargo, la tumba más cara no es la suya sino la de Arturo Guzmán Loera, alias “El Pollo”, hermano de Joaquín “El Chapo” Guzmán, quien fue asesinado en 2004. Este mausoleo, valuado en más de un millón 200 mil dólares, supera a todos los demás en coste.

(Foto: Cuartoscuro)
(Foto: Cuartoscuro)

Otro nombre relevante en este lugar es Nacho Coronel, uno de los líderes del Cártel de Sinaloa, conocido como “El Rey del Cristal” debido a su control en el tráfico de metanfetaminas. Su tumba refleja su alto estatus, siendo una construcción imponente y bien vigilada.

También suscitan interés las historias personales de otros sepultados, como la de Manuel Alejandro Aponte Gómez, alias “El Bravo”, exjefe de seguridad de “El Chapo”, cuya tumba está adornada con detalles que reflejan su vida en el narcotráfico.

(Foto: Cuartoscuro)
(Foto: Cuartoscuro)

La tumba de Amado Carrillo Fuentes, “El Señor de los Cielos”, destaca con una capilla que puede albergar a 50 personas para servicios religiosos, y su valor ha sido estimado en 490 mil dólares. Junto a él reposa su hijo César Carrillo Leyva, alias “Cesarín”, ejecutado en 2020.

Otro mausoleo notable es el que Héctor Luis Palma, conocido como “El Güero Palma”, construyó para su esposa e hijos fallecidos, valorado en 420 mil dólares. Este mausoleo incluye sala, comedor, internet y una suite nupcial.

¿Cuánto cuesta una tumba?

Fundado en 1969, Jardines del Humaya se ha convertido en un punto de atracción para youtubers e influencers, quienes visitan el lugar para grabar contenido para sus redes sociales.

Entre lujos, música de banda
Entre lujos, música de banda y comida, pero también entre la sencillez y la armonía, así luce el panteón Jardines del Humaya. FOTO: JUAN CARLOS CRUZ /CUARTOSCURO.COM

Hace ocho meses, el influencer Adrián Marcelo, ahora participante en La Casa de Los Famosos México 2, visitó el cementerio ubicado en la calzada Heroico Colegio Militar, en la colonia Miguel de la Madrid. Durante su visita, observó un letrero que decía “se vende” en una tumba.

Al indagar sobre el precio, una mujer le informó que el costo era de 1 millón 150 mil pesos y que la construcción incluía dos plantas, siete gavetas con tres depósitos cada una y aire acondicionado.

El acceso al cementerio varía: algunos templos familiares están custodiados, mientras que otros están abiertos al público. A pesar de la vigilancia y el secreto que envuelven muchas de estas tumbas, Jardines del Humaya se ha convertido en una atracción para quienes desean conocer más sobre la vida y la muerte de estas figuras del narcotráfico.

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