Qué es la salmonela, enfermedad que padece Sabine Moussier dentro de ‘La Casa de los Famosos México’

La actriz no se ha sentido bien dentro del reality show

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Sabine Moussier está dentro de La Casa de los Famosos México (Especial Infobae Jovani Pérez)
Sabine Moussier está dentro de La Casa de los Famosos México (Especial Infobae Jovani Pérez)

La nueva temporada de La Casa de los Famosos México ya comenzó y los concursantes empiezan a generar simpatías con los televidentes. Una de las participantes del exitoso reality shows es Sabine Moussier, actriz reconocida en el medio por dar vida a más de una icónica villana de las telenovelas.

Sin embargo, Sabine no ha tenido tiempo de brillar, pues las condiciones no se lo han permitido. Y es que la actriz luce enferma -aunque cada vez mejor- desde hace algunos días. En la cocina de la casa, la actriz reveló la razón de sus malestares: tiene salmonela.

“Salmonela, tengo salmonela.. hay dos tipos de salmonela”, confesó a Karime y a Shanik. Cabe mencionar que hasta ahora la producción de La Casa de los Famosos México no ha dicho nada al respecto de la enfermedad de Sabine ni de su destino en el concurso.

Ellos son los primeros nominados (@LaCasaFamososMx)
Ellos son los primeros nominados (@LaCasaFamososMx)

Mario Bezares, Sabine Moussier, Briggitte Bozzo, Shanik Berman, Agustín Fernández, Arath de la Torre, Luis ‘Potro’ Caballero, Ricardo Peralta ‘Pepe’, Karime Pindter, Mariana Echeverría, Gala Montes, Sian Chiong, Araceli Ordaz ‘Gomita’, Adrián Marcelo y Paola Durante son los aspirantes a ganarse el millonario premio de La Casa de los Famosos México, segunda temporada.

¿Qué es la salmonela y cómo evitarla?

La salmonela es un género de bacterias que causa una infección alimentaria conocida como salmonelosis. Este microorganismo es una de las principales causas de enfermedades transmitidas por alimentos en todo el mundo. Las infecciones suelen originarse a partir de la ingestión de alimentos contaminados, especialmente huevos crudos o poco cocidos, carne de pollo, productos cárnicos, frutas y vegetales contaminados, así como productos lácteos sin pasteurizar.

Los síntomas de la salmonelosis generalmente aparecen entre 6 y 72 horas después del consumo de alimentos contaminados. Estos síntomas pueden incluir diarrea, fiebre, dolor abdominal, náuseas y vómitos. En la mayoría de los casos, los síntomas son leves y los pacientes se recuperan sin necesidad de tratamiento médico específico en un plazo de cuatro a siete días. Sin embargo, en algunos casos, especialmente en niños pequeños, ancianos y personas con sistemas inmunitarios debilitados, la enfermedad puede ser más grave y requerir hospitalización.

(Foto: Canal Salud IMQ)
(Foto: Canal Salud IMQ)

La prevención de la infección por salmonela es fundamental y se logra principalmente a través de buenas prácticas de higiene y manipulación de alimentos. Entre las medidas preventivas se encuentran:

  • Cocinar alimentos a temperaturas adecuadas: Asegurarse de que la carne de pollo y otros productos cárnicos estén bien cocidos a una temperatura interna segura para eliminar bacterias nocivas.
  • Evitar el consumo de huevos crudos: Preferir huevos bien cocidos y evitar preparaciones que incluyan huevos crudos o poco cocidos.
  • Lavar manos y superficies: Lavarse las manos con agua y jabón antes y después de manipular alimentos, y limpiar todas las superficies y utensilios de cocina para evitar la contaminación cruzada.
  • Refrigerar alimentos adecuadamente: Guardar alimentos perecibles en el refrigerador a temperaturas inferiores a 4°C para limitar el crecimiento de bacterias.
  • Consumir productos lácteos pasteurizados: Optar por leche y productos lácteos que hayan pasado por un proceso de pasteurización para eliminar patógenos.

El tratamiento de la salmonelosis en casos leves se centra en la hidratación y el alivio de los síntomas. Es vital mantenerse hidratado y optar por una dieta suave. En casos más graves, puede ser necesaria la administración de antibióticos y el ingreso hospitalario para evitar complicaciones como la deshidratación severa o la propagación de la infección a otros órganos.

Promover hábitos de higiene y prácticas de seguridad alimentaria son claves para reducir la incidencia de esta enfermedad y proteger la salud pública.

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