El 31 de octubre de 2009, el panista Mauricio Fernández Garza se preparaba para asumir la Presidencia Municipal de San Pedro Garza García. Era la segunda vez que llegaba a dicho cargo.
Durante su toma de protesta, como suelen hacerlo los munícipes, habló sobre los proyectos que pondría en marcha a lo largo de su administración, pero el discurso fue interrumpido por una polémica declaración.
“El tema de drogas lo confrontaremos frontalmente y cualquier lugar que se tenga noticia de su venta será combatido por este gobierno municipal [...] Ahorita me acaban de informar que ‘El Negro’ Saldaña, quien aparentemente es el que está pidiendo mi cabeza, hoy amaneció muerto en el Distrito Federal y era el cabeza de los secuestros en San Pedro Garza García. Aquí lo van a entender por las buenas o por las malas”, dijo desde el púlpito.
Sus palabras causaron revuelo debido a que confirmó el asesinato de Héctor ‘El Negro’ Saldaña Perales varias horas antes de que las autoridades capitalinas lo dieran a conocer.
Agentes de la entonces Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) localizaron en la delegación Miguel Hidalgo una camioneta con los cuerpos de cuatro hombres señalados como miembros del cártel de los Beltrán Leyva: ‘El Negro’, su hermano Alan Saldaña, el medio hermano de ambos Carlos Saldaña Rodríguez y César Rodríguez.
Para el momento en que fueron hallados ya tenían entre 48 y 72 horas de haber sido asesinados, según información de la unidad de Homicidios de la Procuraduría. Sin embargo, su localización fue informada oficialmente cuatro horas después de las declaraciones del alcalde Fernández, mientras que los datos sobre su identidad fueron difundidos hasta el día siguiente.
Por si fuera poco, en una entrevista con Carlos Puig para W Radio, el entonces fiscal de Homicidios de la PGJDF, Joel Alfredo Díaz Escobar, reconoció que las familias de ‘El Negro’ y compañía se enteraron de los fallecimientos desde la noche del 30 de octubre, incluso antes del discurso de Mauricio Fernández.
En declaraciones posteriores, Fernández Garza explicó que tuvo conocimiento de los homicidios gracias a un grupo de servicios de inteligencia e incluso expuso que el gobernador de Nuevo León en ese momento, Rodrigo Medina, estaba enterado.
No obstante, el mandatario se deslindó de dicha versión y aclaró días después que únicamente reconoció saber de la existencia del presunto jefe criminal. “Yo le dije que estábamos nosotros a la expectativa, porque teníamos cierta información de su actuación dentro del municipio, aunque no había habido una denuncia formalmente interpuesta [contra ‘El Negro’]”, aseveró Medina de la Cruz, de acuerdo con Proceso.
En 2014 el medio Excelsior dio a conocer que la Procuraduría General de la República (PGR) había iniciado una investigación por supuestos nexos de Mauricio Fernández con los Beltrán Leyva, pues se presumía que pagaba millonarias sumas de dinero a cambio de información e incluso habría establecido un pacto para permitir sus operaciones con la condición de que impidieran la irrupción de otros grupos criminales. Sin embargo, hasta el momento de la presente publicación, no hay claridad sobre el rumbo que tomaron las indagatorias.