INAH registra por primera vez ruinas de un sitio histórico pero no revela su ubicación para mantenerlo a salvo

Durante los trabajos de construcción del Tren Maya en Campeche se registraron hallazgos importantes en las ciudades mayas de Cansacbé, Calakmul de Tenabo, Sacamukuy, Pocboc, además se logró registrar por primera vez un sitio identificado como Santa Cruz N, del que no se dio a conocer su localización para su salvaguardia.

“Gracias a la importancia de estos sitios para la investigación científica, se ha asegurado su preservación,” comentó Diego Prieto Hernández, director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

El uso de tecnologías avanzadas como LiDAR para revisar el terreno por donde se construye el Tren Maya permitió importantes hallazgos.

En el informe, Prieto Hernández desmintió las versiones sobre la destrucción de patrimonio histórico debido a las obras que se llevan a cabo en el sureste mexicano para instalar las vías del Tren Maya.

“Es falso, como han asegurado algunos medios, que haya alguna clase de destrucción del patrimonio histórico o cultural,” afirmó el especialista.

Sostuvo que el rescate exhaustivo de evidencia material en diversas zonas arqueológicas es una muestra clara de que no ha habido destrucción del patrimonio histórico ni cultural, como habían informado erróneamente algunos medios.

Entre los logros más sobresalientes, se destaca la preservación de ocho zonas de monumentos importantes, además de hallazgos significativos en ciudades mayas como Cansacbé, Calakmul de Tenabo, Sacamukuy, Pocboc y Santa Cruz N, cuyo lugar exacto no se ha divulgado para protegerlo.

La inauguración del Museo de Sitio de Edzná fue otro de los hitos, pues no solo alberga monumentos esculpidos como una docena de estelas, sino que también ofrece una visión renovada de su historia prehispánica.

El informe también detalla el uso de tecnologías avanzadas como LiDAR para revisar 11 mil 770 hectáreas y prospectar 2 mil 570 hectáreas.

“El trabajo exhaustivo de diversos especialistas se refleja en el volumen de datos e información procesada,” destacó el funcionario.

Este uso de tecnología ha facilitado el hallazgo y la documentación de 235.4 kilómetros, y ha permitido intervenir en 1,032 monumentos inmuebles y atender 2,454 casos de geotecnia, aspectos cruciales para estudiar las condiciones del suelo y asegurar la preservación durante la construcción de la vía férrea.

El titular del INAH, Prieto Hernández, resaltó los logros en Edzná y Xcalumkín a través del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (PROMEZA). En estas zonas se realizaron trabajos de conservación en edificios previamente excavados y se exploraron nuevas estructuras, permitiendo ampliar las áreas abiertas al público.

“Se realizaron trabajos de conservación en prácticamente la totalidad de los edificios excavados en años anteriores,” afirmó Prieto Hernández.

En cuanto a los métodos y herramientas utilizados, se procesaron más de 296,000 imágenes mediante fotogrametría, se efectuaron 3,900 horas de vuelos de dron y se registraron aproximadamente 178,000 puntos topográficos.

“Estos registros nos permiten una visión completa y detallada de los sitios arqueológicos,” añadió el titular del INAH. Además, se dibujaron más de 270,000 metros cuadrados y 18,000 metros lineales, y en geomática, se registraron 103,000 puntos en el Sistema de Información Geográfica.

Asimismo, se están construyendo dos Centros de Atención a Visitantes (Catvi), que proporcionarán servicios complementarios y fomentarán la conexión de las zonas arqueológicas con sus comunidades vecinas. “El Museo de Sitio de Edzná ofrece una visión renovada de su historia prehispánica,” subrayó Prieto Hernández.