Alejandro Alito Moreno sigue firme al frente del PRI, principalmente luego de que la Asamblea Nacional aprobó cambios en los estatutos que le permitirían mantenerse en el cargo por ocho año más. Sin embargo, en cuatro años de gestión, sus resultados electorales han sido muy cuestionables.
Una infografía de GobernArte sobre el desempeño de los dirigentes partidistas, en donde se revisan los casos de Mario Delgado de Morena, Marko Cortés del PAN y Alito Moreno del PRI, refleja lo que ha sido su liderazgo en el partido.
Quien lleva más tiempo como dirigente partidista es Marko Cortés, quien asumió las riendas del partido el 19 de noviembre de 2018 y quien, a la fecha, luego de la derrota de Xóchitl Gálvez, tiene una aprobación del 36.9%.
Como parámetro de medición, durante su gestión logró el triunfo en cinco entidades, cuatro de ellos con candidato propio: Aguascalientes, Guanajuato, Chihuahua y Querétaro.
Alito Moreno, quien tomó el PRI el 18 de agosto de 2019 y quien cuenta con una aprobación del 27.3%, ganó tres gubernaturas en cinco años, en la cuales, en dos puso al candidato: Durango y Coahuila.
En contraste, las pérdidas fueron agobiantes. En 2021 no ganó ni perdió gubernaturas; mientras que en 2022, el PRI perdió en estados con priismo de larga data como Hidalgo y Oaxaca, así como Quintana Roo y Tamaulipas.
Para el año 2023 la situación fue peor y perdió los comicios en la entidad que era considerada, hasta entonces, como la meca del priismo nacional: el Estado de México.
Este año, además de la elección presidencial, el Revolucionario Institucional perdió en los estados de Yucatán, Morelos, Veracruz, Chiapas, Tabasco, Jalisco, Puebla y la Ciudad de México.
La situación, en el caso de Mario Delgado, en Morena, fue contrastante, pues durante su gestión, que inició el 5 de noviembre de 2020, se obtuvo el triunfo en 22 estados.
Once de ellos en el año 2021: Sonora, Sinaloa, Baja California, Nayarit, Colima, Baja California Sur, Michoacán, Guerrero, Tlaxcala, Zacatecas, Campeche; cuatro más en 2022, en Hidalgo, Oaxaca, quintana Roo y Tamaulipas.
En 2023 ganó el Estado de México y en 2024 refrendó los estados de Veracruz, Chiapas, Tabasco, Puebla y la Jefatura de Gobierno de CDMX, y arrebató los gobiernos de Yucatán y Morelos.