¿Las tarjetas de crédito serán más baratas? Esto dijo Banxico sobre el recorte a las tasas de interés

Los costos de las tarjetas de crédito pueden disminuir si el Banco de México (Banxico) reduce las tasas de interés, la razón es que los porcentajes que los propios bancos cobran en productos como las tarjetas de crédito suelen estar ligadas a las tasas de interés de referencia.

Cuando estas tasas de referencia bajan, los costos de endeudamiento para los bancos también disminuyen, lo que les permite ofrecer tasas de interés más bajas a sus clientes en productos como las tarjetas de crédito.

Una reducción por parte de Banxico significa que los usuarios pagarán menos en intereses sobre sus saldos pendientes, reduciendo el costo total del crédito, y esto podría permitirles realizar más compras o invertir en otros proyectos.

Este jueves el Banco de México manifestó su disposición para comenzar a debatir posibles recortes en la tasa de interés, en vista de las mejores perspectivas sobre la inflación.

Sin embargo, el banco central ha advertido que mantendrá una vigilancia estrecha sobre los choques globales y una actividad económica que podría resultar más débil de lo esperado.

En una minuta correspondiente a la reunión del pasado 27 de junio, los miembros del Banxico mantuvieron sin cambios la tasa de interés en el 11 %. Esta es la segunda ocasión consecutiva en que se mantiene esta tasa, siguiendo un primer recorte de 25 puntos base efectuado el 30 de marzo, el primer ajuste tras estar casi un año en un nivel récord de 11,25 %.

La minuta revela que tres de los cinco integrantes de la Junta de Gobierno se inclinan por un recorte en la próxima reunión de política monetaria, programada para el 8 de agosto. Si se concreta, será el segundo recorte del año.

La estrategia, según destacó el documento, es mantener una postura monetaria restrictiva que conduzca a la convergencia de la inflación hacia la meta del 3 % en el horizonte de pronóstico.

“El entorno inflacionario permite discutir ajustes en la tasa de referencia hacia adelante,” expresa la minuta y añade, que también se tomará en cuenta la perspectiva de que los choques globales continúan desvaneciéndose. Asimismo, se observarán los efectos de una actividad económica más débil de lo previamente anticipado.

Banxico “considerará la incidencia de la postura monetaria restrictiva que se ha mantenido y la que siga imperando sobre la evolución de la inflación a lo largo del horizonte en el que opera la política monetaria”. Esto enfatiza el compromiso del banco central para mantener una inflación baja y estable. Banxico continuará ajustando la tasa de interés conforme a la trayectoria necesaria para asegurar la convergencia sostenida de la inflación general a la meta del 3 %.

Es importante destacar que la decisión tomada en junio ocurrió antes de las últimas cifras de inflación publicadas en México, que situaron la tasa en 4,98 % para junio, la más alta en un año. Por otro lado, la inflación subyacente, que excluye factores de alta volatilidad como los combustibles, se ubicó en 4,13 %, el nivel más bajo desde marzo de 2021.

El Banco de México reiteró en su comunicación la prudencia que guiará sus decisiones futuras, resaltando que las acciones implementadas “serán congruentes, en todo momento, con la trayectoria requerida para propiciar la convergencia ordenada y sostenida de la inflación general a la meta de 3 %”. La minuta refleja la postura del banco central ante la complejidad del panorama económico global y los desafíos internos, que exigen un manejo cuidadoso de la política monetaria.

El escenario económico internacional y nacional, marcado por la moderación en el crecimiento global y posibles desajustes en las cadenas de suministro, será clave en la toma de decisiones del Banxico. La institución mantendrá su foco en consolidar un entorno económico que favorezca la estabilidad de precios a largo plazo.