El excandidato a la Presidencia de la República del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Francisco Labastida Ochoa, recordó el asesinato de Luis Donaldo Colosio Murrieta y develó una de las teorías que tendría para entender el magnicidio que cimbró a su instituto político.
Durante una entrevista, el extitular de la Secretaría de Gobernación (Segob) fue cuestionado sobre el hecho que sacudió la política mexicana en marzo de 1994, por lo que aprovechó para develar que, para él, grupos del narcotráfico pudieron estar involucrados en el fallecimiento del priista.
Con base en lo que contó, meses antes de que ocurriera el asesinato, mantenía comunicación constante con el expresidente del tricolor y éste le confesó que su plan, en caso de convertirse en el titular del Ejecutivo Federal, era atacar a la células del narco que ya tenían poder en ciertos puntos de la República Mexicana.
“Luis Donaldo, de quien yo fui amigo y con quien platica siempre de política y de seguridad, nunca de Economía —ambos compartían profesión—, me dijo un día que él se metería directamente con el narco (para erradicarlo) y yo le dije que no lo dijera, que era muy arriesgado decirlo”, expresó ante los cuestionamientos de la periodista Carmen Aristegui.
Debido a la seriedad de sus señalamientos, el político fue cuestionado sobre si se refería a que el narcotráfico estuvo detrás del asesinato del originario de Magdalena de Kino, Sonora, a lo que respondió que “sí, definitivamente, narcos, narcos”.
Asimismo, Labastida Ochoa calificó como un extraordinario candidato a Colosio Murrieta; sin embargo, reiteró que se negó a que siguiera con su plan de limpiar al país del narcotráfico, no porque no pudiera hacerlo, sino por el peligro que representaba.
“Habló en general de limpiar al país del narcotráfico y lo decía absolutamente convencido”
El tema del asesinato de Colosio resurgió tras la celebración de la XXIV Asamblea Nacional del PRI, pues el dirigente nacional del partido, Alejandro Alito Moreno Cárdenas, aseguró que dentro seguían militando personas que estaban involucradas con el magnicidio y que la habían causado daño al partido.
Aunque en un primer momento no dio nombres de sus acusaciones, un día después, en la conferencia de prensa que ofreció desde las instalaciones del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) señaló a Manlio Fabio Beltrones, a quien señaló de estar implicado, según investigaciones judiciales.
“¿Saben cuánto daño nos hizo eso ante la sociedad mexicana a lo largo del tiempo? Y claro está, uno de los señalados en los expedientes, no lo digo yo, lo dice la investigación judicial, es Manlio Fabio Beltrones”, expresó.
Asesinato de Luis Donaldo Colosio
Luis Donaldo Colosio Murrieta, candidato a la Presidencia de la República por el Partido Revolucionario Institucional en 1994, pronunció durante su campaña uno de los discursos más significativos en la historia política reciente de México. Días después, el 23 de marzo de 1994, fue asesinado en un mitin en la colonia Lomas Taurinas de Tijuana, Baja California.
En el contexto de la época, el PRI dominaba la política mexicana desde hacía más de siete décadas. Sin embargo, el inicio de la campaña de 1994 estuvo marcado por el levantamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) el 1 de enero y las críticas al gobierno de Carlos Salinas de Gortari, lo que generó una atmósfera de tensión y descontento social.
Colosio, originario de Magdalena de Kino, Sonora, fue baleado después de bajar del escenario, cuando se dirigía a su vehículo, rodeado de una pequeña escolta y simpatizantes. A pocos metros del templete, Colosio recibió dos disparos: uno en el oído y otro en el abdomen, según los videos y testimonios presentes. Fue llevado al Hospital General de Tijuana, donde se declaró su muerte.
Mario Aburto Martínez, un joven de 23 años, fue arrestado y posteriormente sentenciado a 45 años de prisión por el asesinato de Colosio. Este suceso provocó una sacudida en el panorama político del PRI y, en general, en el sistema político mexicano.