Cinco personas fallecieron en el municipio de Colón, en el estado de Querétaro, tras consumir bebidas embriagantes adulteradas. La información fue confirmada por el secretario de Gobierno, Carlos Alcaraz, quien también señaló que otras dos personas se encuentran en estado delicado en el hospital.
La Secretaria de Salud, Martina Pérez Rendón, precisó que los fallecidos habían llegado al Hospital General de Cadereyta de Montes, ubicado aproximadamente a 60 kilómetros de la comunidad de Ejido Patria, donde se sospecha que las bebidas fueron adquiridas. Pérez Rendón comentó: “Al parecer hay datos de intoxicación, sin que podamos precisar aún cuál fue la sustancia”.
Ante estos hechos, el gobierno estatal ha decidido incrementar los esfuerzos para controlar la venta clandestina de bebidas alcohólicas en toda la entidad. El subsecretario Federico de los Cobos será el encargado de coordinar los operativos con las autoridades municipales. Alcaraz declaró: “Se le pidió al Subsecretario Federico de los Cobos que llevara a cabo la revisión para poder supervisar, repito, en todos los municipios, con la información que nos puedan brindar”.
Cuáles son los riesgos de consumir bebidas alcohólicas adulteradas
El consumo de bebidas alcohólicas adulteradas representa un grave riesgo para la salud debido a la presencia de sustancias tóxicas y contaminantes. Uno de los peligros más significativos es el metanol, un alcohol industrial que puede encontrarse en estas bebidas. Este compuesto es extremadamente tóxico y su ingesta puede causar síntomas como dolores de cabeza intensos, mareos, náuseas y vómitos. En casos más severos, puede llevar a la ceguera permanente, daño cerebral irreversible, insuficiencia renal e incluso la muerte.
Además del metanol, estas bebidas pueden contener otros contaminantes químicos peligrosos y bacterias que no se eliminan debido a la falta de controles sanitarios en su producción. La exposición a estos elementos puede resultar en intoxicaciones alimentarias y complicaciones gastrointestinales severas, incluyendo diarrea, dolor abdominal agudo y deshidratación.
Asimismo, pueden contener concentraciones de alcohol mucho más altas de lo indicado, lo que aumenta el riesgo de intoxicación etílica aguda. Además, no están sujetas a las regulaciones de producción y etiquetado, lo que significa que los consumidores no tienen garantías sobre lo que están ingiriendo.
Cómo saber si mi bebida está adulterada
Detectar alcohol adulterado puede ser crucial para evitar riesgos de salud. Algunos indicios incluyen un sabor y olor inusualmente fuertes o desagradables, presencia de partículas o sedimentos en la bebida, y una coloración turbia o anormal.
Si el envase tiene etiquetas mal impresas, mal colocadas o sin información clara sobre el fabricante, es una señal de alerta. Reacciones físicas como dolor de cabeza inmediato, náuseas, mareos y ardor en la garganta también pueden indicar la presencia de sustancias tóxicas.