Hace un par de meses, en Infobae México te presentamos dos videos virales donde un taquero y un tiktoker mexicanos terminaron en el hospital tras consumir comida callejera en India. Ambos declararon que el platillo llamado “Kachori” les causó un fuerte dolor de estómago y estuvieron cerca de la muerte debido a una congestión estomacal.
Además, el famoso tiktoker peruano Óscar Curi también supuestamente perdió la vida al consumir el mismo platillo callejero, sin embargo, posteriormente se supo que solo había sido internado por indigestión. Estos casos han generado preocupación y controversia en redes sociales sobre la seguridad y la higiene de la comida callejera en India.
El vendedor del “Kachori”, cuyo nombre verdadero aún no se ha dado a conocer, defendió su producto ante las acusaciones. “Los que dicen que se enferman, al acabar de comer en mi puesto, se van por un postre a unos locales que están más adelante. Mis productos son de alcalinidad y preparados higiénicamente,” sostuvo.
El comerciante argumentó que tiene muchos clientes fieles y que ninguno ha terminado en el hospital debido a su comida. “Pueden preguntarles a mis comensales a quien les ha hecho daño,” aseguró, y uno de sus clientes lo respaldó diciendo, “A mí lo que más me ha dado son agruras.”
La situación ha generado un debate sobre la seguridad alimentaria y la responsabilidad de los vendedores de comida callejera. Mientras algunos defensores del vendedor sugieren que otros factores, como el consumo de postres de otros locales, podrían haber contribuido a los problemas de salud reportados, los críticos señalan la necesidad de reforzar las normas de higiene y seguridad en la preparación de alimentos.
Estos incidentes subrayan los riesgos potenciales de consumir alimentos en entornos desconocidos, especialmente cuando se trata de platillos exóticos para el estómago no acostumbrado como el “Kachori”. Al mismo tiempo, resaltan el impacto que las redes sociales pueden tener en la percepción pública de la seguridad alimentaria, ya que los videos virales suelen influir en la opinión de millones de personas alrededor del mundo.
La polémica alrededor del “Kachori” en India sigue creciendo, mientras los afectados continúan compartiendo sus experiencias y el vendedor defiende la calidad de sus productos.