María Elena Ríos denunció que Berenice Ramírez Jiménez, magistrada presidenta del Tribunal de Justicia de Oaxaca, ha incurrido en violencia digital en su contra. Ríos presentó su denuncia pública a través de redes sociales y ha mantenido que Ramírez Jiménez podría absolver a su agresor, Juan Antonio Vera Carrizal.
“Tuve la oportunidad de ser escuchada por la senadora de la República, Olga Sánchez Cordero como conocedora del sistema penal acusatorio le causó indignación la violencia institucional y la violación a mis derechos humanos qu ejerce una mujer. La magistrada presidenta del Tribunal Superior de Justicia del estado de Oaxaca, Berenice Ramírez Jiménez”, explicó.
“No solamente ha ordenado un juicio arreglado para poder absolver a Juan Antonio Vera Carrizal. Me percaté que junto a mi agresor tiene la valiosa encomienda de seguirme revictimizando y desprestigiando en Oaxaca, del que tuve que salir huyendo. Esta violencia digital inició hace casi 5 años, desde el día uno en que me agredieron Juan Antonio Vera Carrizal y su hijo Juan Antonio Vera Hernández hoy prófugo de la justicia. Mismos que me mandaron a matar con ácido”.
Asimismo, señaló que la presidenta del Tribunal Superior de Justicia al verse exhibida rompió el silencio. Fue a través de una publicación en donde aseguró que su juez, el que está llevando el juicio oral de María Elena Ríos había actuado con respeto.
Por otro lado, indicó que la narrativa que maneja la campaña en su contra aseugra que la saxofonista busca politizar su casi. Sin embargo María Elena aseguró que desde un inicio su caso involucró tintes de este tipo, “siempre estuvo politizado porque el que me quiso matar fue un ex legislador del PRI protegido por un gobernador, Alejandro Murat”, dijo.
“La misma Comisión de los Derechos Humanos la que se percató de toda esta corrupción y obstaculización. Que emitió una recomendación al gobierno del estado”.
El caso de la saxofonista oaxaqueña ha sido pieza clave para que se lograra promover la “Ley Malena”, mediante la cual se busca castigar la violencia contra las mujeres, específicamente que los ataques con ácido sean calificados como tentativa de feminicidio. Hoy en día su objetivo es que que esta ley se aplique en todas las entidades y niveles de gobierno de México.
Actualmente Vera Carrizal se encuentra en el penal de Tanivet, en Oaxaca, desde abril de 2020. No obstante el presunto agresor y autor intelectual del intento de feminicidio continúa solicitando amparos para frenar su vinculación a proceso.
En enero de 2023 se le había dado la medida cautelar de prisión domiciliaria para llevar su proceso, lo cual no sucedió, pues finalmente una jueza apeló y logró que siguiera en prisión preventiva.