Un juez federal ordenó a las autoridades penitenciarias no dejar incomunicado a Rey David Santiago Vargas, alias “El Oso”, operador de Los Chapitos del Cártel de Sinaloa, quien fue capturado a finales de junio en un operativo de las fuerzas armadas en la ciudad de Culiacán, bastión de la facción.
El Oso, quien fue recapturado el pasado 27 de junio y llevado al Centro Federal de Readaptación Social Número 1, mejor conocido como El Altiplano, ubicado en el municipio de Almoloya de Juárez, Estado de México, promovió un amparo contra cualquier acto de incomunicación, malos tratos, actos degradantes y tortura física o psicológica, entre otros.
De acuerdo con el diario Milenio, el juez Tercero de Distrito de Amparo en Material Penal, Augusto Octavio Mejía Ojeda, otorgó la medida cautelar reclamada por Rey David, para que estos actos no se lleven a cabo.
El supuesto operador, coordinador de las células de sicarios y traficantes de Los Chapitos fue arrestado elementos del Ejército Mexicano y de la Guardia Nacional el pasado jueves 27 de junio en inmediaciones del sector Terranova, al poniente de la ciudad, luego de que se realizaran operativos para revisar dos inmuebles.
Las autoridades mexicanas acusan a “El Oso”, quien estaría bajo el mando de Iván Guzmán Salazar, El Chapito, hijo de Joaquín El Chapo Guzmán, de coordinar las operaciones de tráfico de droga en diversas comunidades del estado de Sinaloa.
Rey David “S” fue capturado en diversas ocasiones. En 2017, fue apresado en Hermosillo, Sonora, acusado de supervisar células criminales en varios puntos de Sinaloa. Esta es solo una de las múltiples incidencias que ilustran su involucramiento en actividades ilícitas.
En una captura anterior, en 2016, agentes de la Secretaría de Marina (Semar) lograron detener a “El Oso”, quien supuestamente operaba bajo las órdenes de Dámaso López Núñez, conocido como “El Licenciado”.
En ese momento, “El Licenciado” era un jefe de plaza del Cártel de Sinaloa vinculado a Joaquín Guzmán Loera, mejor conocido como El Chapo Guzmán. Posteriormente, en mayo de 2017, López Núñez fue arrestado en la Ciudad de México y un año después, extraditado a los Estados Unidos.
Rey David “S” mantuvo vínculos con organizaciones delictivas tanto en Sinaloa como en Baja California Sur, según las autoridades. A pesar de haber sido liberado inicialmente, fue recapturado en 2017 bajo la acusación de portar armas de fuego de uso exclusivo de las autoridades, según información de medios de comunicación.
Para entonces, se le había relacionado con Alfredo Guzmán Salazar e Iván Archivaldo Guzmán, ambos hijos de El Chapo y líderes de Los Chapitos. Este grupo delictivo ha sido señalado por su implicación en la crisis de salud pública en Estados Unidos debido al tráfico de fentanilo hacia el territorio norteamericano.
“El Oso” intentó llevar su proceso en libertad, pero fue posteriormente identificado y recapturado bajo sospechas de reincidir en actividades criminales. Su conexión con individuos de alto perfil dentro del narcotráfico mexicano lo mantiene bajo estricta vigilancia por parte de las autoridades.
Santiago Vargas también es identificado como un operador financiero de Iván Archivaldo y, según reportes de N+, habría participado en el llamado Culiacanazo en octubre del 2019, evento en el que fue capturado y posteriormente liberado Ovidio Guzmán López, otro de los hijos de El Chapo y quien actualmente se encuentra en EEUU donde es acusado de posesión de drogas con la intención de distribuirlas; participación en una empresa criminal continua; conspiración para importar, manufacturar y distribuir sustancias controladas; conspiración para lavado de dinero y portación de armas de fuego.