Sin duda los caldos son una excelente opción para obtener nutrientes y beneficios importantes debido a que son fáciles de preparar y en ellos pueden incluirse una gran cantidad de ingredientes que juntos aportan dosis importantes de vitaminas, minerales y proteínas.
Pero sin duda entre ellos hay uno que destaca por ser un platillo tradicional de las casas mexicanas, nos referimos al caldo de pollo, el cual puede ser visto por muchos como un platillo simple pero que; sin embargo, en realidad se trata de una comida que aporta multivitaminas y cuyo consumo regular puede ser una importante fuente de colágeno natural que será de gran ayuda para tus articulaciones.
En este sentido, el caldo de pollo es considerado saludable por varias razones:
- Hidratación: Al ser una preparación líquida, contribuye a mantener una adecuada hidratación del cuerpo.
- Nutrientes: Aporta nutrientes esenciales como proteínas, vitaminas y minerales provenientes del pollo y los vegetales utilizados.
- Digestión: Es fácil de digerir, ideal para personas con problemas digestivos o que se están recuperando de alguna enfermedad.
- Calorías bajas: Generalmente tiene un bajo contenido calórico, lo que lo convierte en una opción adecuada para dietas de control de peso.
- Propiedades antiinflamatorias: Los aminoácidos presentes en el caldo, como la glicina y la prolina, tienen propiedades antiinflamatorias.
- Refuerzo inmunológico: Los componentes del caldo de pollo pueden ayudar a fortalecer el sistema inmunológico.
- Confort: Consumir caldo caliente puede aliviar síntomas de resfriado y gripe, proporcionando confort y mejorando la sensación de bienestar.
Excelente fuente de colágeno
Como sabemos, el colágeno se encuentra abundantemente en las articulaciones, huesos y cartílagos de diversas carnes, entre ellas el pollo. Al cocinar el pollo durante largas horas, especialmente si se utilizan partes como las patas y las alas, el colágeno se descompone y se disuelve en el caldo.
El consumo de caldo de pollo con colágeno puede ofrecer varios beneficios:
- Salud articular: El colágeno puede ayudar a mantener la salud de las articulaciones y reducir el dolor asociado con condiciones como la osteoartritis.
- Salud de la piel: Puede contribuir a mejorar la elasticidad y la hidratación de la piel.
- Digestión: El colágeno puede favorecer la integridad de la mucosa intestinal, contribuyendo a una mejor salud digestiva.
- Fortalecimiento: Ayuda en el fortalecimiento de uñas y cabello.
Sin embargo, ara maximizar la cantidad de colágeno en el caldo, es recomendable cocinarlo de una manera un poco diferente a la tradicional, es decir, a fuego lento y durante varias horas.
Receta fácil para prepara caldo de pollo
Para preparar un caldo de pollo, necesitas los siguientes ingredientes:
- 1 pollo entero o partes de pollo (con hueso)
- 2 zanahorias
- 2 ramas de apio
- 1 cebolla
- 3 dientes de ajo
- 1 hoja de laurel
- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
- Agua
Instrucciones:
- Lava bien el pollo y córtalo en partes si es necesario.
- Pela y corta en trozos grandes las zanahorias, el apio y la cebolla.
- En una olla grande, agrega el pollo, las zanahorias, el apio, la cebolla, los dientes de ajo y la hoja de laurel.
- Llena la olla con agua, cubriendo completamente los ingredientes.
- Lleva la olla a fuego alto hasta que empiece a hervir.
- Una vez que hierva, reduce el fuego a medio-bajo y cocina a fuego lento por aproximadamente 1.5 a 2 horas.
- Durante la cocción, retira la espuma y las impurezas que suban a la superficie con una cuchara.
- Agrega sal y pimienta al gusto.
- Cuando el caldo esté listo, cuela el líquido para separar los sólidos.
- Deja enfriar y guarda el caldo en el refrigerador o utilízalo de inmediato.
Este caldo puede ser base para sopas, guisos y diferentes recetas.