En diversos países de ingresos altos, como Francia y Reino Unido, los vaporizadores forman parte de las políticas públicas para combatir el tabaquismo, recientemente, Egipto, nación en vías de desarrollo levantó las restricciones a dichos dispositivos con el objetivo de combatir el consumo de tabaco.

En nuestro país, desde mayo de 2022, el gobierno, mediante decreto presidencial prohibió todo aquello relacionado con la industria de los vaporizadores.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), recién recomendaron la implementación de marcos regulatorios para el mercado de los cigarrillos electrónicos con el objetivo de contribuir y asegurar su uso restringido únicamente a personas mayores de edad, con el fin de promover hábitos de consumo más seguros y responsables.

En ese sentido, México y el Mundo Vapeando, organización civil encabezada por Juan José Cirión Lee, aseguró que el respaldo de dichas instituciones internacionales, a través de José Gerardo Moya Medina, representante en México de ambas organizaciones, representa “un gran paso en la lucha en contra del tabaquismo.”

“Contrario a la política prohibicionista del gobierno mexicano, la decisión de la OMS y de la OPS de apoyar la regulación de los vaporizadores va en línea con la estrategia de acercar instrumentos de riesgo reducido a las personas que desean abandonar el tabaquismo, al tiempo que se definen reglas para evitar que estos dispositivos electrónicos no estén al alcance de menores de edad”, destacó Cirión desde el Foro Global de Nicotina (GFN por sus siglas en inglés), desde Varsovia, Polonia.

El 12 de junio, Moya Molina, en el marco de una conferencia de prensa con motivo del Día Mundial sin Tabaco, destacó que ambas instituciones -OMS y OPS- recomendaban regular el mercado de los cigarros electrónicos, “Desde la OPS/OMS recomendamos crear ambientes cien por ciento libres de humo de tabaco y de emisiones, regular los cigarrillos electrónicos, prohibir la publicidad, promoción y patrocinio”, externó el funcionario.

En esa tónica, el activista reprochó que en México los vaporizadores estén prohibidos por decretos presidenciales, mientras las autoridades de Egipto acordaron permitir y regular la comercialización de los dispositivos electrónicos para combatir el tabaquismo.

Por ello, exhortó a las autoridades mexicanas revisar y aprender de la experiencia internacional en donde los dispositivos de riesgo reducido, como los vaporizadores, han comprobado su eficacia científica para revertir el consumo de tabaco; también les pide asumir una posición responsable y dejar de confundir y desinformar a la población sobre las ventajas que representan los vaporizadores.

“Desde el momento en que nuestros gobiernos, lo primero que hacen es aplicar prohibiciones con base en mentiras, nos damos cuenta de que la población no comprende la realidad del concepto de reducción de daños por la propia desinformación gubernamental”, manifestó desde el Foro Global de Nicotina.

Egipto, nación en vías de desarrollo, se sumó a las naciones que levantaron las restricciones a los dispositivos electrónicos con el objetivo de combatir el tabaquismo; el país que reporta el mayor consumo de cigarrillos per cápita en la región de Medio Oriente y África del Norte luego de que, en 2011, su Ministerio de Salud prohibió la comercialización, registro e importación de cigarros electrónicos, medida que desató un peligroso “mercado negro” de dispositivos.

Sin embargo, ante los resultados de varios estudios sobre las ventajas de los vaporizadores en el combate contra el tabaquismo y la experiencia internacional, éste 2024, Egipto legalizó la comercialización y el consumo de los artefactos; su territorio alberga alrededor de 13.9 millones de fumadores, poco más de 61 mil personas mueren anualmente por dicha afección.

“En México debemos buscar que las alternativas se regulen para que las personas puedan decidir libremente lo que quieran”, apuntó Cirión Lee.

A finales de abril pasado, se dieron a conocer los resultados de un estudio realizado por David Levy (Universidad de Georgetown) y el mexicano Rafael Meza (Universidad de British Columbia), que reveló que si en México se derogara la prohibición y se promoviera una regulación basada en la ciencia, se reducirían significativamente las tasas de tabaquismo: 40% para los hombres y 30% en las mujeres, evitando así 106 mil muertes entre 2025 y 2049.

En el GFN, Roberto Sussman, presidente de la organización Provapeo, también pidió dejar de lado la desinformación y las posiciones dogmáticas y dar paso al conocimiento y la ciencia. “No hay justificación científica para una prohibición general como humo de tabaco ambiental”, consideró.

Por su parte, Konstantinos Farsalinos, cardiólogo e investigador en el Centro Onassis de Cirugía Cardiaca en Atenas, Grecia, se pronunció a favor de que en los distintos países se apliquen regulaciones específicas para evitar el consumo de vaporizadores entre menores de edad.