La Fiscalía General de Justicia (FGJ) de Guerrero confirmó el asesinato de Esmeralda Garzón Campos, regidora del municipio de Tixtla que abandonó la filas del PRI durante el proceso electoral para solicitar su registro en Morena.
De acuerdo con los primeros reportes, la regidora fue atacada a balazos alrededor de las 14:30 cuando salía de su casa en la calle Montaño, en el poblado de Santiago.
A la llegada de los servicios de emergencia, los paramédicos confirmaron que Esmeralda Garzón Campos ya no presentaba signos vitales; minutos más tarde la Policía Municipal y la FGE implementaron un operativo de seguridad para dar con los responsables, empero, hasta el momento no hay reporte de personas detenidas.
“Agentes de la Policía Investigadora Ministerial (PIM) y de los Servicios Periciales, acudieron al lugar en donde se llevan a cabo los actos de investigación correspondientes que permitan obtener los datos de prueba necesarios para esclarecer el ilícito. Asimismo, se desplegó un operativo para dar con el o los responsables”, informó la Fiscalía de Guerrero.
Quién es Esmeralda Garzón
La regidora asesinada viene de una familia de políticos reconocidos en Guerrero: es hija de la exdiputada del PRI, Violeta Campos, y del exalcalde de Chilpancingo, Ausencio Garzón; además de ser sobrina del exgobernador Héctor Astudillo Flores y de Saúl Nava Astudillo, excandidato (en 4 ocasiones) a la presidencia municipal de Tixtla.
Aunque Esmeralda Garzón Campos fue postulada por el PRI para llegar al cabildo de Tixtla en 2021, durante el proceso electoral 2023-2024 abandonó sus filas para unirse a las filas de Morena; durante la campaña se le vio pidiendo el voto para la virtual ganadora de la elección presidencial, Claudia Sheinbaum, y para Beatriz Mojica, candidata de Morena al Senado.
“Estamos en la ruta del bien. Sin miedo”, fue una de las últimas publicaciones de Esmeralda Garzón en Facebook; en otra publicación, compartió una imagen de ella junto a Beatriz Mojica Morga, durante el cierre de campaña de ésta en Acapulco, Guerrero.
Violencia política no para
Al corte del 4 de junio, la organización civil Causa en Común reportó el asesinato de 63 políticos durante el proceso electoral 2023-2024, incluyendo los homicidios dolosos de 37 aspirantes o candidatos a cargos públicos de elección popular cometidos en 17 estados del país.
Los 37 candidatos asesinados superan los crímenes cometidos en los procesos electorales de 2021 (30) y 2018 (27), lo que convierte a la actual contienda en la más violenta de la historia moderna de México.
Guerrero (12), Chiapas (11) y Michoacán (7), son los estados donde se presentó la mayoría de los homicidios de actores políticos; mientras que en materia de partidos políticos, Morena fue el más atacado con el 30 por ciento de los crímenes.
“Estas cifras conviertes a la recientes elecciones en las más violentas en la historia moderna de México. Sin embargo, a la violencia homicida se suman además los reportes de secuestros, heridos, desapariciones y amenazas de grupos criminales”, se lee en el reporte de Causa en Común.
A pesar de la violencia política que envolvió el proceso electoral en Guerrero, la gobernadora Evelyn Salgado salió a declarar, días previos a los comicios, que las elecciones estaban garantizadas con el despliegue de 24 mil elementos que cuidarían a la ciudadanía. Declaraciones pronunciadas a unos días del asesinato del candidato de Coyuca de Benítez durante el cierre de su campaña.
Pero la gobernadora no fue la única, su padre y candidato al Senado, Félix Salgado Macedonio, afirmó que la violencia no interfirió en las elecciones y recalcó que los hechos violentos “fueron muy aislados” y que no detuvieron a la población para que ejerciera su voto: “los resultados fueron buenos y satisfactorios”.