La Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó este 4 de junio que el nivel de llenado de las 210 principales presas del país descendió al 36% en la última semana, con un volumen total de 46 mil 136 millones de metros cúbicos.
Aunque la temporada de lluvias arrancó a mitad de mayo, el reporte técnico señala que en los últimos meses los niveles de precipitaciones están por debajo del promedio de los últimos 30 años, situación que agrava las condiciones de sequía en la mayor parte de México.
En su reporte técnico semanal, la Conagua detalló que del 1 de octubre de 2023 al 2 de junio de 2024, se han acumulado apenas 232.4 milímetros (mm) de lluvia, lo que representa 8.6 % menos precipitación que los registros habituales de 1991 a 2020.
Esto quiere decir que las lluvias han sido insuficientes para recuperar los niveles de las principales presas del país. En cuanto al Sistema Cutzamala, su nivel de llenado se redujo al 27.5%, debido a que se reanudó la extracción de agua desde la presa Valle de Bravo.
El Cutzamala es responsable de abastecer aproximadamente el 20% del agua potable que se consume en la Ciudad de México, pero ante la escasez de lluvias, su nivel se ha reducido drásticamente en lo que va de 2024.
Por su parte, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ha informado que, desde el inicio de la Temporada de Lluvia y Ciclones Tropicales 2024, que comenzó el 15 de mayo en la cuenca del océano Pacífico y el 1 de junio en la del Atlántico, no se ha registrado ninguno de los sistemas pronosticados.
La temporada de lluvias y ciclones es un periodo crítico para la gestión del agua y la protección de la población en diversas regiones del país. La situación actual de las presas refleja un nivel de almacenamiento relativamente bajo, lo cual podría tener implicaciones en términos de disponibilidad de agua para consumo humano, riego, y generación de energía.
Mayo fue el mes más caluroso de los últimos años
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó que mayo de 2024 fue el mayo más cálido registrado, con una temperatura media de 27 grados Celsius, lo que representa un aumento de 2.9 grados con respecto a la media histórica.
El 2 de junio pasado, el municipio de Pungarabato, en Michoacán, alcanzó una temperatura récord de 47.1 grados Celsius, superando los 46.9 grados registrados el 13 de junio del año anterior. Este nuevo récord subraya el impacto del aumento de las temperaturas en distintas regiones de México.
Entre el 27 de mayo y el 2 de junio, se registraron temperaturas superiores a los 40 grados Celsius principalmente en áreas del Bajío, el Golfo de México, la Mesa del Norte, el noreste, el Pacífico norte y sur, así como en la Península de Yucatán. Este incremento de temperaturas afecta tanto a zonas urbanas como rurales, exacerbando problemas relacionados con la salud pública y la agricultura.
De acuerdo con el SMN, estos incrementos en las temperaturas medias están relacionados con patrones climáticos inusuales y podrían ser una señal de las consecuencias del cambio climático. Las autoridades han recomendado tomar medidas preventivas para mitigar los efectos del calor extremo, especialmente en las regiones más afectadas.
Para lograr una gestión eficiente del agua es preciso implementar sistemas de riego más eficientes, como el riego por goteo, así como la modernización de la infraestructura hídrica para reducir pérdidas.
La plantación masiva de árboles para aumentar la captura de agua y reducir la erosión del suelo, es otra de las acciones fundamentales.
Algunos expertos también han planteado la inversión en plantas desalinizadoras para convertir el agua de mar en potable.