Cómo preparar gelatina con huesos para obtener más colágeno

El colágeno es conocido por su importante papel en la salud de la piel, pues contribuye a mantener su firmeza, hidratación y elasticidad, ayudando a reducir la aparición de arrugas y signos de envejecimiento.

Para obtener esta proteína es recomendable comer gelatina, un alimento que se sabe que es rico en este elemento.

La riqueza en colágeno de la gelatina se debe a que está hecha a base de tejidos de origen animal, como piel, huesos y cartílagos.

El primer consejo para beneficiarse de este producto es consumirlo en su presentación natural, sin saborizantes ni azúcares añadidos.

Un tip más que te ayudará obtener más colágeno es utilizar huesos y cartílagos en la preparación. Si el sabor que tendrá te preocupa, puedes optar por añadir fruta, como fresa o kiwi, que son ricas en vitamina C y ayudan a la producción natural de esta proteína que retrasa el envejecimiento de la piel.

A continuación la receta para preparar la gelatina con huesos, hecha con huesos y cartílagos.

Ingredientes:

• Huesos con cartílago (de res, cerdo o pollo)
• Agua
• Verduras (opcional)
• Sal y especias al gusto

Instrucciones:

• Limpieza: lava bien los huesos y cartílagos para eliminar cualquier residuo o impureza.
• Cocción: coloca los huesos y cartílagos en una olla grande y cúbrelos con agua. Añade las verduras, sal y especias si decides usarlas.
• Hervor: lleva la mezcla a ebullición a fuego alto. Una vez que comience a hervir, reduce a fuego lento.
• Cocción lenta: cocina a fuego lento durante 12 a 24 horas. Este proceso permite que el colágeno se extraiga de los huesos y cartílagos.
• Colado: una vez finalizada la cocción, cuela el líquido para eliminar los huesos, cartílagos y restos de verduras.
• Enfriado: deja que el líquido se enfríe a temperatura ambiente y luego refrigéralo durante varias horas o toda la noche.
• Uso: la gelatina resultante se habrá solidificado. Puede usarse directamente o como base para preparar gelatina con frutas u otros ingredientes.

Este método asegura la extracción máxima de colágeno de los huesos y cartílagos, proporcionando una gelatina rica en este valioso componente.

Si optas por utilizar esta mezcla como base para una gelatina de fruta, te recomendamos seguir estos pasos para la segunda preparación.

Ingredientes:

• 1 litro de jugo de fruta natural (preferentemente fresa, kiwi u alguna otra que sea rica en vitamina C)
• 30 gramos de gelatina sin sabor (aproximadamente 4 sobres de 7.5 gramos cada uno)
• Endulzante al gusto (azúcar, miel, stevia)
• Frutas frescas en trozos (opcional)

Instrucciones:

• Preparar el jugo: si usas jugo fresco, cuélalo para eliminar pulpa y semillas. Calienta el jugo en una olla hasta que esté tibio, pero sin que llegue a hervir.
  
• Disolver la gelatina: en un recipiente aparte, hidrata la gelatina sin sabor con una taza de agua fría. Deja reposar durante unos 5 minutos hasta que esté esponjosa.
  
• Incorporar la gelatina: una vez hidratada, añade la gelatina a la olla con el jugo tibio y mezcla constantemente hasta que se disuelva por completo. Si decides endulzar, agrega el endulzante en este paso y mezcla bien.
  
• Agregar frutas (opcional): si deseas incluir trozos de frutas, colócalos en los moldes o recipientes individuales donde verterás la gelatina. Recuerda que al fondo debe ir la mezcla que obtuviste de los huesos y cartílagos.
  
• Verter la mezcla: vierte la mezcla de gelatina y jugo en los moldes o recipientes y deja enfriar a temperatura ambiente.
  
• Refrigerar: coloca los moldes en el refrigerador y deja reposar durante al menos 4 horas, o hasta que la gelatina esté completamente cuajada.