El 7 de junio de 1999 pasó a la historia como un trágico día, pues Paco Stanley fue asesinado a los 56 años en el Charco de las ranas, un restaurante en la parte sur de la Ciudad de México. El caso actualmente volvió a recobrar fuerza debido al estreno de la serie ¿Quién lo mató?, que ficciona el crimen.
No obstante, aquí te compartimos que, cuando Jorge Gil estaba internado en el hospital Medica Sur tras haber sido lesionado en el mismo atentado donde su compañero perdió la vida, compartió qué el día de la catástrofe el presentador de Pácatelas habría hablado sobre pistolas y armas de fuego.
¿Qué dijo Paco Stanley sobre las armas?
Un día después del asesinato de Paco Stanley, TV Azteca transmitió un homenaje conducido por Pati Chapoy en memoria del fallecido. Ahí, se contaron con varios testimonios y Jorge Gil hizo un enlace telefónico desde la institución de salud en donde estaba internado.
Durante la plática, Gil ahondó en que Stanley fue un gran amigo, jefe y padre de familia. Asimismo, remarcó que el famoso siempre buscaba lo positivo de la sociedad mexicana.
En este sentido rememoró que apartir de esa visión fue que surgieron los famosos Pacomentarios, los cuales tenían como objetivo aportar algo bueno al público.
“Curiosamente ayer (7 junio) él comentaba sobre un pequeño de nueve años de edad que le quiso robar una bicicleta a una pequeña de 11 años y lo lamentable es que este pequeño estaba armando. Curiosamente este reclamo de él por una campaña de despistolización, de concientización... aún falta mucho por hacer”.
Así dio Jorge Gil su primer testimonio sobre muerte de Paco Stanley
Durante esa misma entrevista que estuvo a cargo de Chapoy, Jorge Gil recordó un poco abrumado cómo había vivido el ataque en el Charco de las ranas.
“Es una pesadilla que todavía tengo y la verdad es que yo quiero recordar a Paco como él siempre fue y no rodeado de violencia. Lo único que sé es que no logré ver nada más que escuchar muchísimos disparos, y mi instinto de supervivencia me hizo brincar al asiento de más atrás de la camioneta”, comentó y añadió:
“Yo venía atrás del señor Stanley, de Paco, su chofer estaba del otro lado. Esperábamos a Mario, cuando de pronto el chofer gritó ‘cuidado’ y al empezar la balacera, las detonaciones, simplemente miré para atrás. Brinqué, sí salí herido, pero yo creo que Paco, como ser humano, como persona íntegra, no merecía un final así, porque era contrario a su ideal de la unión de su gente, de todos los mexicanos”.