Cuál es la probabilidad de que la Onda Tropical Número 1 evolucione a huracán

La Onda Tropical Número 1 tendrá consecuencias en México desde la noche de este 31 de mayo. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) prevé que afecte a Chiapas, Oaxaca, Nuevo León, Coahuila y San Luis Potosí con lluvias fuertes.

En Ciudad de México, Colima, Durango, Guanajuato, Hidalgo, Morelos, Nayarit, Puebla, Querétaro y Tlaxcala podría causar lluvias puntuales. Mientras que en Estado de México, Guerrero, Jalisco, Michoacán y Zacatecas su podría tener menor efector, con chubascos.

Esta primera onda tropical estará acompañada de vientos con rachas de 60 a 80 km/h, propicios para la formación de torbellinos y tornados en Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas. En tanto en Aguascalientes, Jalisco y Zacatecas hay probabilidad únicamente de torbellinos, por las ráfagas de 50 a 70 km/h.

Tampoco esán descartadas tolvaneras, las cuales se podrían formar en Chihuahua, Durango, Baja California, Baja California Sur, Ciudad de México, Estado de México, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Michoacán, Puebla, Querétaro, Sonora, Tlaxcala y Veracruz.

El SMN determinó que hay baja probabilidad de que forme un ciclón tropical en 48 horas, lo cual significa que el riesgo de que evolucione a huracán es mínimo.

Los ciclones tropicales se desarrollan en varias etapas dependiendo de la velocidad de sus vientos, empezando como una depresión tropical, luego tormenta tropical y eventualmente un huracán, de acuerdo con el Centro Nacional de Prevención de Desastres.

Una distinción significativa en el estudio de los fenómenos meteorológicos es que, aunque todos los huracanes son ciclones tropicales, no todos los ciclones tropicales alcanzan la categoría de huracán.

En la última etapa de un ciclón tropical, cuando se considera huracán, su intensidad se mide con base en cinco categorías de acuerdo con la escala Saffir-Simpson,

La escala Saffir-Simpson se implementa para ayudar a las autoridades y al público a entender los posibles daños y los preparativos necesarios según la intensidad de los vientos. Un huracán de Categoría 1 puede causar algunos daños materiales, mientras que un huracán de Categoría 5 puede resultar en devastaciones mayores, incluyendo daños catastróficos a la infraestructura y serias inundaciones.

En tierras mexicanas inició la temporada de huracanes el 15 de mayo, fecha marcada para el comienzo de ciclones en el Pacífico. Mientras que en el océano Atlántico será a partir del 1 de junio que habrá probabilidad de formación de estos fenómenos naturales.

La Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó que la temporada de ciclones tropicales en el océano Atlántico será más activa de lo habitual este año. Se espera que el número de sistemas ciclónicos en la región supere el promedio, con una probabilidad superior al 50% de alcanzar o superar los 14 sistemas ciclónicos normalmente registrados, según datos difundidos por la institución.

En contraste, en el océano Pacífico, se prevé una temporada de ciclones dentro de la media o hasta un 10% por encima del promedio tradicional de 15 sistemas ciclónicos. Esta proyección indica que, aunque habrá una actividad significativa de ciclones, no alcanzará el nivel de la predicción para el Atlántico, según los informes proporcionados por Conagua.

Los datos difundidos por Conagua subrayan la importancia de prepararse adecuadamente para la temporada de ciclones, especialmente en el Atlántico, donde se anticipa una mayor actividad. Las autoridades y la población deben estar en alerta y tomar medidas preventivas ante la posibilidad de un número elevado de ciclones.

Además, la dependencia enfatizó la relevancia de seguir las recomendaciones de protección civil y mantenerse informados a través de canales oficiales. La institución continuará monitoreando las condiciones climáticas y emitirá avisos oportunos para asegurar la seguridad de la población.