Aunque la temporada de lluvias inició el pasado 15 de mayo, la mayor parte del territorio mexicano sufren de sequía, pues de acuerdo con el reporte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), 2 mil 105 de los 2 mil 471 municipios presentan algún tipo de afectación por la escasez de precipitaciones.
El 100% del territorio de la Ciudad de México sufre de sequía severa (D2) desde hace 16 meses, por lo que es la entidad con mayor tiempo en estas condiciones, de acuerdó con el Monitor de Sequía de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), datos que confirman la inusual evaporación que han sufrido los pocos canales que subsistían en Xochimilco.
Durante la primera quincena de mayo de 2024, el territorio mexicano vio un aumento significativo en las zonas afectadas por la sequía extrema a excepcional (D3 a D4). Según el reporte de Conagua, las áreas afectadas en el noreste, centro y occidente del país experimentaron un incremento notable en estas condiciones.
Este incremento fue consecuencia de la segunda onda de calor del año, asociada con una circulación anticiclónica en niveles medios de la atmósfera, lo que provocó temperaturas de calurosas a muy calurosas en todas las entidades de México. Las condiciones han agravado la sequía severa (D2) en regiones como Oaxaca, el sur de Veracruz, Chiapas y Tabasco, donde también surgieron áreas con sequía extrema (D3).
A pesar de registrarse lluvias en puntos específicos de Coahuila, Puebla, Oaxaca, Chiapas y la zona limítrofe entre Tabasco y Campeche debido al desplazamiento del sistema frontal No. 50 y la interacción de varios factores climáticos, estas no fueron suficientes para reducir las áreas con sequía.
Para mediados de mayo, el porcentaje de territorio nacional con sequía de moderada a excepcional había alcanzado el 70.76%, lo que representa un incremento del 2.79% en comparación con finales de abril.
Estos fenómenos climáticos incluyeron también la presencia de canales de baja presión y líneas secas en interacción con la corriente en chorro subtropical, así como la llegada de humedad de los océanos y la inestabilidad en niveles altos de la atmósfera. Sin embargo, las precipitaciones registradas no lograron mitigar las condiciones de sequía preexistentes.
Este 29 de mayo, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó que la influencia de la circulación anticiclónica en los niveles medios de la atmósfera es un factor clave en la persistencia de la ola de calor, según explicó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
Este sistema de alta presión inhibe la formación de sistemas nubosos, lo que conduce a un aumento significativo en las temperaturas en gran parte del país. Por esa razón más de la mitad de las entidades mantendrán altas temperaturas que podrían superar los 40 grados Celsius.
Los retos de la sequía en México
La sequía en México presenta múltiples desafíos que afectan diversos sectores del país. En el ámbito agrícola, la falta de agua ha causado una significativa reducción en la producción de cultivos esenciales como el maíz y el frijol, lo que amenaza la seguridad alimentaria y los ingresos de los agricultores.
Además, la sequía impacta las fuentes de agua potable, especialmente en comunidades rurales que dependen de pozos y ríos, poniendo en riesgo la salud pública.
En el sector energético, la disminución de niveles en embalses afecta la generación de energía hidroeléctrica, incrementando la dependencia en combustibles fósiles y elevando los costos de electricidad.
La escasez de agua también repercute en la biodiversidad, provocando la muerte de flora y fauna y alterando ecosistemas.
La urbanización descontrolada y la deforestación han exacerbado los efectos de la sequía, mientras que el cambio climático ha aumentado la frecuencia y severidad de estos eventos.