Descartan nuevas enfermedades o residuos tóxicos en cadáveres de monos aulladores en Chiapas y Tabasco

Los laboratorios oficiales de Agricultura y Salud han confirmado que los monos aulladores (Alouatta Palliata) fallecidos en estas regiones no presentan enfermedades emergentes ni residuos tóxicos, según informaron en el marco del concepto Una Salud.

Expertos de las secretarías de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Agricultura y Desarrollo Rural y Salud, lanzaron un operativo de emergencia para determinar las causas de la mortandad de estos monos silvestres en distintos municipios de Chiapas y Tabasco. Tras examinar los cuerpos y realizar estudios exhaustivos, descartaron la presencia de agentes tóxicos o enfermedades infecciosas según los organismos oficiales.

En coordinación con las autoridades locales de Tabasco y Chiapas, los veterinarios de la Dirección General de Salud Animal del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), se trasladaron a lugares como Juárez, Pichucalco, Centro, Comalcalco y Nacajuca. Tomaron muestras biológicas de especímenes afectados que fueron analizadas en laboratorios de alta seguridad.

El Centro Nacional de Servicios de Diagnóstico en Salud Animal (Cenasa), ubicado en Tecámac, descartó enfermedades como influenza y distintas encefalitis equinas. Por su parte, el Centro Nacional de Referencia en Parasitología Animal y Tecnología Analítica (Cenapa), localizado en Jiutepec, concluyó que no hay presencia de pesticidas ni otros contaminantes en los organismos de los monos.

La Secretaría de Salud, a través del Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (Indre), realizó estudios para detectar fiebre amarilla, con resultados negativos. Este análisis estuvo enfocado en prevenir y controlar posibles brotes de enfermedades zoonóticas y proteger la salud pública.

Durante las inspecciones, se observó que la falta de lluvia y las altas temperaturas han reducido los niveles de agua en arroyos y manantiales, lo que afecta a la fauna local. Residente informaron sobre incendios forestales en la región, lo que agrava la situación de los monos aulladores.

Según las conclusiones preliminares de los expertos, la principal causa de mortalidad sería el golpe de calor y la escasez de agua. Este diagnóstico se basa en la evidencia de alta temperatura y sequía extremas en la región, que impacta a los arroyos, recurso vital para la especie.

El gobierno de México informó que la cifra de monos aulladores muertos debido al calor ha aumentado a 157. Un pequeño número de primates está recibiendo atención o en proceso de recuperación.

Un parque ecológico en el norte del país confirmó la muerte de al menos un centenar de pericos, murciélagos y otros animales, supuestamente a causa de la deshidratación. Un domo de calor —zona de alta presión— situado sobre el sur del golfo de México y el norte de Centroamérica ha prevenido la formación de nubes, provocando intensas temperaturas en todo el país.

La semana pasada, ambientalistas reportaron que 138 monos aulladores habían sido encontrados muertos en el estado de Tabasco desde el 16 de mayo. Las autoridades pronosticaron temperaturas de hasta 45 grados Celsius (113 grados Fahrenheit) en casi dos terceras partes de México.

La Secretaría de Medio Ambiente reportó el domingo que el número de primates muertos aumentó a 157 y que las causas exactas todavía estaban bajo investigación.