En las últimas 24 horas en el volcán Popocatépetl se han registrado 85 exhalaciones de baja intensidad acompañadas de vapor de agua, gases volcánicos y ligeras cantidades de ceniza, además de 130 minutos de tremor (movimiento de magma al interior del cráter) y un sismo volcanotectónico de magnitud 1.8, de acuerdo con el más reciente reporte del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) junto con el Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Si bien da la impresión de que en los últimos meses ha aumentado la actividad del coloso, es necesario precisar que las explosiones, el lanzamiento de fragmentos incandescentes, la caída de ceniza e incluso los sismos de baja magnitud están contemplados dentro de los escenarios del Amarillo Fase 2 del Semáforo de Alerta Volcánica, indicó la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC); además, la dependencia ha indicado que estas manifestaciones no han tenido el nivel de años anteriores como para considerar un cambio de fase o de color.
Sin embargo, las autoridades federales y locales recomiendan a la población de los estados que están dentro de la zona de influencia del volcán no hacer caso a rumores sobre su actividad y sólo informarse en los canales oficiales, tal como el portal www.gob.mx/cenapred y la cuenta @CNPC_MX en X, así como en los teléfonos que Cenapred tiene para reportar las emergencias relacionadas con la actividad volcánica: 800-713-4147 y 911.
Según la Coordinación General de Protección Civil del Estado de Puebla, para este lunes 20 de mayo se prevé caída de ceniza en los estados de Morelos y Guerrero; aunque vale recordar se trata de un pronóstico basado en los análisis de dispersión y trayectoria de nubes volcánicas de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA, en inglés), y podría cambiar dependiendo de la dirección del viento así como la altura y potencia de las emisiones.
Semáforo de Alerta Volcánica
Para advertir el peligro en el que se encuentra un volcán activo, como lo es el Popocatépetl, el Cenapred y la UNAM cuentan con el Semáforo de Alerta Volcánica.
Como cualquier otro semáforo, el de Alerta Volcánica tiene tres colores: verde, amarillo y rojo. En seguida te explicamos qué significa cada color:
Verde
El color verde significa que todo está en la normalidad, este color tiene dos fases, en la fase uno quiere decir que el volcán se encuentra en calma, mientras que en la fase dos solo se presentan ligeras manifestaciones de actividad, como fumarolas y actividad sísmica esporádica.
Amarillo
El color amarillo señala que la actividad del volcán es mayor. Este color está dividido en tres fases:
Fase uno, cuando el volcán presenta manifestaciones claras de actividad, como sismicidad volcánica local frecuente, fumarolas o plumas de vapor de agua y gas, así como emisiones esporádicas y ligeras de ceniza.
Fase dos, en esta el volcán muestra un incremento de actividad con explosiones esporádicas, pluma continua de vapor y agua, caída de ceniza leve a moderada en poblaciones cercanas, lanzamiento de fragmentos incandescentes y posibilidad de flujos piroclásticos de corto alcance asociados a las explosiones, crecimiento y destrucción de domos de lava, así como flujos de lodo o de escombros de corto alcance.
Fase tres, el volcán presenta actividad explosiva de escala intermedia a alta, crecimiento rápido de domos de grandes dimensiones y su destrucción en explosiones fuertes, plumas de vapor de agua, gases y cenizas persistentes, explosiones de intensidad creciente con el lanzamiento de fragmentos incandescentes, posibilidad de flujos piroclásticos de mediano alcance y caída de ceniza notoria en poblaciones cercanas.
Rojo
El color rojo significa que hay peligro y se debe estar listo para la evacuación. Este color está dividido en dos fases:
Fase uno, quiere decir que el volcán muestra actividad explosiva de escala intermedia a alta, la emisión de columnas de vapor de agua y gas es de varios kilómetros de altura, lanzamiento de fragmentos incandescentes sobre las laderas del volcán, caída de ceniza importante en poblaciones y ciudades lejanas, así como flujos piroclásticos y flujos de lodo que pueden alcanzar a poblaciones cercanas.
Fase dos, el volcán presenta actividad explosiva de escala alta a extrema, las columnas eruptivas son de decenas de kilómetros de altura y gran alcance, caídas intensas de ceniza, arena y fragmentos volcánicos sobre poblaciones a distancias mayores, posibles derrumbes parciales del edificio volcánico, flujo de piroclásticos y flujos de escombros masivos que pueden alcanzar a poblaciones cercanas e intermedias, grandes lahares de efectos devastadores y graves daños al entorno.
México, un país de volcanes
El Popocatépetl es uno de los volcanes más activos en el país y se encuentra en los límites territoriales de las entidades de Morelos, Puebla y el Estado de México, sin embargo está cerca de la Ciudad de México y Tlaxcala; tiene una altitud de 5 mil metros sobre el nivel del mar, lo que lo convierte en el segundo más alto del país y, de acuerdo con científicos de la Universidad de Manchester, es el quinto volcán en riesgo de entrar en erupción en los próximos años.
En México existen al menos 46 volcanes activos, de los cuales seis son señalados como de alto riesgo por el Cenapred, por lo que monitorea su actividad para reaccionar de forma oportuna en caso de una emergencia o una erupción mayor. Los de mayor peligrosidad son: el Popocatépetl; el Volcán de Fuego, en Colima; el Ceboruco, en Nayarit; el Pico de Orizaba, en los límites de Veracruz y Puebla; el Chichón, en Chiapas y el Tacaná, que está en la frontera con Guatemala.
En caso de una explosión mayor del Popocatépetl, ésta no desataría una detonación en cadena porque cada volcán es independiente, cada uno tiene sus propios conductos, sus propias fuentes de magma, que no están directamente relacionadas, de tal manera que la actividad de un volcán no va a afectar ni para arriba ni para abajo la actividad de otros volcanes.