La reciente declaración de Karina Alvarado, regidora de Zitácuaro, en respuesta al documental de Netflix “El Guardián de las Monarcas,” ha sido meticulosamente analizada por la grafóloga y experta en lenguaje corporal Maryfer Centeno, ofreciendo una visión profunda sobre las verdaderas emociones de la funcionaria en torno a los señalamientos que se le hacen por la desaparición y posterior hallazgo sin vida del activista Homero Gómez González.
En un video posteado en su canal de YouTube, Maryfer Centeno destaca que desde el inicio de su declaración, Karina Alvarado muestra un rostro de notable indignación y frialdad.
Centeno también se detiene en la parte en la que Karina Alvarado intenta llorar cuando habla de los ataques que le han hecho en las redes sociales; esta expresión carece de las lágrimas que uno esperaría ver en una situación tan emocionalmente cargada. Según la grafóloga, esta falta de sinceridad en su demostración de tristeza y preocupación impide que Alvarado conecte emocionalmente con la audiencia.
“Hay un momento donde parece que está llorando pero no le salen lágrimas, eso termina por no conectar”, señala Maryfer.
El análisis sugiere que el lenguaje corporal de Alvarado está dominado por una mezcla de enojo y desesperación. Este coraje, más que mostrar arrepentimiento, intensifica la imagen de una regidora más preocupada por su reputación que por el fallecimiento de Gómez González.
Centeno menciona que los gestos de Alvarado reflejan alta tensión. “Los hombros se juntan con las orejas cuando se encoge, como sintiendo vergüenza, estrés, tensión”, explica. Indicó que este tipo de gestualidad es típico de alguien que está bajo una gran presión, pero no ayuda a generar empatía. En lugar de traer alivio o comprensión, estos gestos refuerzan la percepción de que Alvarado está más interesada en su situación personal, añadió.
También señaló que las manos de Alvarado están en una posición de imposición, lo que según Centeno, es un intento de controlar la narrativa. “Los dientes se adelantan, las manos están en modo de imposición, parece que se le van a salir los ojos”, describe la experta.
Durante su declaración, la regidora alterna su mirada hacia abajo, lo cual según Centeno, denota una mezcla de vergüenza y estrés. “Ve hacia abajo, toda la tensión cae, ya no puede del coraje, está enojadísima”, añade la grafóloga. La falta de contacto visual y la tensión visible son indicativos de una persona que está intentando contener su enojo, pero que no logra empatizar con su audiencia.
La frialdad y el enojo que Alvarado muestra impiden una conexión emocional efectiva con el público. “Cuando tú quieras generar empatía no te muestres enojado”, aconseja Centeno. El análisis sugiere que, más que una muestra de dolor o arrepentimiento, Alvarado presenta una postura confrontativa que aumenta la desconfianza pública.
Finalmente, Maryfer Centeno concluye que es crucial que los políticos, al enfrentarse a situaciones de crisis, busquen asesoría en control de daños. “Hace falta que los políticos conozcan lo que es el control de daños”, comenta. La grafóloga señala que la soberbia y el manejo inadecuado de las emociones pueden repercutir negativamente en la percepción pública.
¿Por qué señalan a Karina Alvarado?
Karina Alvarado, regidora de Zitácuaro, se ha convertido en el centro de una polémica tras el estreno del documental “El Guardián de las Monarcas” en Netflix. Este documental, que se encuentra entre lo más visto en México, revive el caso del activista ambiental Homero Gómez González, conocido defensor de la mariposa monarca. La producción no solo resalta la labor de Gómez, sino que también arroja luz sobre las circunstancias que rodearon su desaparición y muerte, señalando posibles implicaciones de figuras políticas.
Uno de los puntos que más ha llamado la atención es la presencia de Karina Alvarado entre las últimas personas que vieron con vida a Gómez González. El documental sugiere que después de la muerte del activista, Alvarado tramitó amparos y evitó dar declaraciones a los productores de Netflix. Esta negativa a colaborar ha sido vista con sospecha por algunos internautas, que exigen justicia y transparencia en el caso.
El hecho de que Alvarado restringiera comentarios en sus redes sociales tras el lanzamiento del documental también ha alimentado la controversia. Además, se ha señalado que un asistente de Alvarado supuestamente tomó un celular y una tablet propiedad de Gómez González el día que desapareció.
¿Qué dijo Karina Alvarado para defenderse?
Ante la creciente presión pública y los ataques en redes sociales, Alvarado rompió el silencio para dar su versión de los hechos y defender su postura.
En un video publicado por el medio Mi Zitácuaro, Alvarado expresó su respeto y admiración por Homero Gómez González, afirmando que eran amigos y mantenían una relación profesional y de camaradería. La regidora explicó que su relación con Gómez González se remontaba a su tiempo a cargo de la delegación de turismo en el oriente de Michoacán, donde solía visitar el santuario de la mariposa monarca frecuentemente.
Aclaró que la razón por la cual no participó en el documental de Netflix se debió a que no fue contactada de manera formal. Según explicó, los productores la buscaron a través de Instagram y WhatsApp, pero nunca hicieron un acercamiento directo a su oficina. Además, señaló que nadie de la familia de Homero Gómez le pidió participar en el documental, por lo que no le dio importancia a la solicitud.
En relación a las acusaciones de haber tomado un celular y una tablet propiedad de Gómez González el día de su desaparición, Alvarado explicó que estos objetos fueron recogidos por uno de sus compañeros, Jorge, con la intención de devolvérselos al día siguiente. También desmintió que Jorge fuera su fotógrafo o asistente, e indicó que éste no murió sino que fue víctima de desaparición.
La regidora desmintió rotundamente haber solicitado amparos tras la muerte de Homero Gómez González. Afirmó que nunca ha tramitado un amparo en su vida ni ha solicitado los servicios de un abogado, y atribuyó estos rumores a las difamaciones de una exsíndica de Ocampo.
En su video, Karina Alvarado también señaló que ha colaborado plenamente con las autoridades. Aseguró que rindió su declaración ante la fiscalía y permitió que revisaran su celular.
Visiblemente afectada, Alvarado relató cómo ha sido víctima de ataques agresivos en redes sociales, incluyendo amenazas de muerte y comentarios ofensivos que han afectado a sus amigos y familiares. Entre supuestas lágrimas, manifestó que los rumores y la controversia han puesto en duda su palabra y su reputación, pero subrayó que no cerrará sus redes sociales y seguirá adelante a pesar del acoso.
Karina Alvarado concluyó defendiendo su postura y reiterando su inocencia ante las acusaciones, señalando que el documental presenta una imagen injusta de ella.