En lo que se considera la mayor incautación de metanfetamina en España y la segunda en toda Europa, agentes antidrogas desmantelaron una célula ligada al Cártel de Sinaloa que operaba en al menos cuatro ciudades de la península ibérica.
La cacería de esta red criminal comenzó casi un año antes del golpe final. A principios de 2023, agentes de la Policía Nacional tuvieron conocimiento de la presencia de un grupo delincuencial establecido en Tenerife que se encargaba de distribuir drogas en las Islas Canarias.
La detención de un integrante les permitió averiguar que la estructura utilizaba electrodomésticos para ocultar la droga proveniente desde México y, de esta manera, moverla a través de la península.
Introducían los paquetes de esta mercancía en diversos productos y los enviaban a través de empresas de transporte que desconocían el contenido.
Gracias al monitoreo de estos movimientos, la Policía logró incautar 24 kilogramos de cocaína que estaban ocultos en dos lavadoras. El cargamento salió de Madrid y se dirigía a Tenerife, una de las islas del archipiélago canario.
El cártel pretendía pasar desapercibido con esta estrategia, pero fue precisamente el envío de esas lavadoras lo que levantó fuertes sospechas entre las autoridades. Las alarmas de la Policía se activaron debido a que los electrodomésticos tienen un costo menor en las Islas Canarias, por lo que no tenía sentido importarlas desde Madrid.
Los oficiales realizaron un seguimiento a esta operación y ubicaron una empresa al sur de Madrid desde la cual se había hecho el envío. En ese punto, iniciaron labores de vigilancia para identificar a los miembros de la organización que estarían detrás de los hechos.
Como resultado de ello, se percataron de que el jefe de la organización “operaba desde la provincia de Valencia y adoptaba importantes medidas de contravigilancia para eludir ser investigado”. Entre estas precauciones, la organización utilizaba al menos dos vehículos para transportarse durante sus operaciones con estupefacientes. En uno de trasladaba la droga, mientras otro iba a la cabeza con el objetivo de avisar la presencia de cualquier retén.
El 6 de mayo de 2024, la Policía detectó un nuevo envío de este grupo asociado al Cártel de Sinaloa en el que estaba involucrada una furgoneta. Los agentes siguieron el vehículo hasta una vivienda en el municipio de Villena. Después de hora y media, interceptaron la furgoneta y encontraron que estaba modificada para ocultar droga en el suelo.
Durante el operativo se realizó un cateo al domicilio, en el que los agentes encontraron al aparente líder del Cártel de Sinaloa en España quien, acorde con reportes preliminares, sería originario de Sinaloa y tendría entre 35 y 40 años.
En la furgoneta fueron encontrados 224 kilogramos de metanfetamina, mientras que al interior del chalet se descubrieron mil 500 kilogramos más. En total, hay cinco detenidos señalados como miembros de esta célula criminal, entre los cuales hay tres hombres españoles y una mujer de nacionalidad rumana.