México se prepara para enfrentar una nueva embestida de calor extremo, según los últimos pronósticos del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y la Comisión Nacional de Agua (Conagua).
Tras el cese de la segunda ola de calor el pasado 11 de mayo, se anuncia la inminente llegada de la tercera de cinco, la cual se espera que alcance su punto máximo a finales del mes en curso, con temperaturas máximas que podrían llegar hasta los 48 °C en varias regiones del país.
Esta ola de calor, programada para irrumpir entre el 16 y 18 de mayo, no solo traerá consigo un aumento significativo en las temperaturas, sino también condiciones climáticas extremas que podrían afectar a diversos estados mexicanos.
¿Qué entidades serían los más afectados?
Entre las entidades más vulnerables se encuentran Campeche, Chiapas, Guerrero, Michoacán, Oaxaca, Tabasco y Veracruz, donde se anticipa que las temperaturas sobrepasen los 45 °C, generando un riesgo elevado para la salud de la población.
Sin embargo, no solo estas regiones enfrentarán el impacto de esta ola de calor. Se espera que entidades como Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Coahuila, Colima, Durango, Guanajuato, Hidalgo, Jalisco, Morelos, Nuevo León, Puebla, Querétaro, Quintana Roo, Sonora y Zacatecas también sufran temperaturas extremas, alcanzando hasta los 40 °C, lo que aumenta la preocupación por la salud y la seguridad de sus habitantes.
Ante esta situación, las autoridades meteorológicas emitieron recomendaciones urgentes para protegerse del calor intenso. Se aconseja evitar la exposición directa al sol durante períodos prolongados, utilizar protector solar, mantenerse adecuadamente hidratado, vestir ropa ligera y de colores claros, así como utilizar sombreros y gafas de sol para protegerse de los rayos UV.
Asimismo, se insta a la población a estar alerta ante los síntomas de golpe de calor, como dolor de cabeza, mareos, fatiga extrema y náuseas, y a buscar atención médica de inmediato en caso de experimentarlos. Es importante recordar que los niños pequeños, los adultos mayores y las personas con enfermedades crónicas son especialmente vulnerables a los efectos del calor extremo.
La llegada de esta tercera ola de calor también ha generado preocupación en la Ciudad de México y el Estado de México, donde se espera que las temperaturas extremas causen cortes de energía eléctrica imprevistos y afecten el suministro de agua.
Estos fenómenos pueden agravar aún más las condiciones de vida de la población, especialmente en zonas urbanas densamente pobladas. La llegada de esta nueva ola de calor en México representa un desafío significativo para la salud pública y la infraestructura del país.