En los registros del cine mexicano, hay nombres que resplandecen con luz propia, y entre ellos destaca María Elena Marqués Rangel. Más que una figura emblemática de la Época de Oro, es la abuela del político Miguel Torruco Garza, cuyo legado artístico y compromiso con la cultura trascienden generaciones.
Miguel Torruco Garza es hijo del Secretario de Turismo Miguel Torruco Marqués y diputado en la LXV Legislatura, fue seleccionado por el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) para encabezar la contienda electoral por la alcaldía de Miguel Hidalgo.
Miguel Torruco Marqués ha destacado como una figura clave en el ámbito político y empresarial del país; es hijo de los actores María Elena Marqués y Miguel Torruco Castellanos, quienes destacaron en el Séptimo Arte.
Trayectoria de María Elena Marqués
María Elena Marqués, nacida en Ciudad de México en 1926 y fallecida en 2008, dejó una huella imborrable en la historia del cine y la televisión mexicanos. Su carrera artística comenzó en 1942 cuando debutó en la película “Dos corazones y un tango”, dirigida por Mario del Río.
Su talento fue descubierto por el director Fernando de Fuentes, su vecino, quien la impulsó a realizar una prueba de actuación. Su primer papel importante llegó en 1943, cuando actuó junto a María Félix en la película “Doña Bárbara”, dirigida también por Fernando de Fuentes. Esta colaboración marcó el inicio de una carrera cinematográfica exitosa.
Con su talento y carisma, Marqués conquistó al público en cada papel que interpretó. Desde sus primeras colaboraciones hasta sus icónicas actuaciones junto a leyendas como María Félix, Jorge Negrete y Cantinflas, demostró una versatilidad y profundidad interpretativa que la destacaron como una verdadera estrella de la pantalla grande.
También destacó en radio y televisión
Además de su trabajo en el cine, Marqués incursionó en la radio y la televisión. Participó en 15 radionovelas y 30 programas en la XEW, consolidando su popularidad en el ámbito radiofónico. En televisión, destacó en aproximadamente 20 teleteatros, 10 telenovelas y en el programa “Así es mi tierra”.
Su versatilidad actoral también la llevó a los escenarios teatrales, donde compartió créditos con Manolo Fábregas en la obra “Hablando de asesinatos”.
María Elena Marqués fue reconocida internacionalmente al recibir el premio a Mejor Actriz en la Bienal de Cine de Venecia, convirtiéndose en la única mexicana en obtener este prestigioso galardón.
Vida familiar
María Elena Marqués valoraba profundamente su vida familiar. Se casó con el actor Miguel Torruco, con quien compartió momentos de alegría y compañerismo. Aunque su matrimonio fue breve debido al trágico fallecimiento de Torruco en 1956, su unión dejó como legado dos hijos: Marisela y Miguel Torruco Marqués.
Miguel Torruco Marqués desde temprana edad demostró un interés por el servicio público y el turismo. Graduado en Administración Hotelera por la Universidad Autónoma Metropolitana, ha dedicado su vida profesional a promover el desarrollo de la industria turística en México.
Su carrera política inició en la década de 1970, cuando se desempeñó como Director General de Turismo del Gobierno del Distrito Federal. Posteriormente, ocupó diversos cargos en el ámbito público, incluyendo la Dirección General en la Secretaría de Turismo y la Subsecretaría de Turismo en el Gobierno de la CDMX
Su hijo Miguel Torruco Garza sigo sus pasos en la política, fue fundador del movimiento digital “Millennials”, además de ser pionero en el uso de las nuevas tecnologías para involucrar a los jóvenes en el proceso político y fomentar su participación activa en la construcción de un México más justo y equitativo.
Fue designado como candidato de Morena para la alcaldía de Miguel Hidalgo en la Ciudad de México, lo que refleja el reconocimiento de su liderazgo y capacidad para generar consensos y construir un futuro próspero para su comunidad.
A través de su legado artístico, María Elena Marqués es un testimonio del talento y la pasión que caracterizan al cine mexicano de la Época de Oro, y su memoria perdurará como un faro de inspiración para las futuras generaciones.