AMLO reacciona a la muerte de estudiante en el CCH Naucalpan tras ataque de porros: “Fue muy lamentable”

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), se pronunció la mañana de este jueves 9 de mayo sobre los hechos ocurridos en las inmediaciones del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Naucalpan donde un estudiante de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán perdió la vida y otros más se dijo, quedaron en calidad de heridos. Si bien aseguró que su gobierno no reprime y tampoco vulnerará la autonomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), adelantó que ya se estaba investigando para dar en adelante un reporte más detallado.

“Fue muy lamentable porque sí hubo este enfrentamiento; se esta haciendo la investigación de estudiantes. Unos universitarios, más que nada de preparatorias con estudiantes del CCH Naucalpan y lamentablemente falleció un joven en ese enfrentamiento entre los grupos; y ya se está haciendo la investigación y se va a informar sobre los responsables”, dijo desde el Salón de la Tesorería de Palacio Nacional.

El mandatario federal y fundador de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), confirmó que la policía del municipio de Naucalpan, en el Estado de México, detuvo varios de de los presuntos responsables; sin embargo, López Obrador aseguró que será en adelante cuándo se sepa más al respecto.

Cabe destacar que, antes de abordar el tema que ha conmocionado a la comunidad universitaria, el presidente fue cuestionado sobre un plantó en las instalaciones de la denominada Máxima Casa de Estudios cuyo objetivo es que las autoridades rompan relación con el Gobierno de Israel derivado del conflicto armado con Palestina, por lo que el morenista adelantó que de ese tema no daría a conocer su punto de vista, mas dejó claro que su administración se había caracterizado por no oprimir, en especial porque la UNAM es autónoma y no violaría ese derecho.

“Es a libertad, esto está sucediendo en todos los países, sobre todo en estados Unidos. Aquí nada más decir que nosotros no reprimimos, además en la UNAM que es autónoma no vamos a violar la autonomía de la universidad. Preferimos reservarnos nuestro punto de vista para que no se vaya a manejar mal porque tengo que andar con cuidado”.

La tarde del pasado miércoles 8 de mayo se reportó un enfrentamiento entre grupos denominados porros en las inmediaciones del CCH Naucalpan donde el saldo fue de un estudiante muerto y varios heridos. Al respecto, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) lamentó los hechos, al tiempo que canceló las clases en el campus ubicado al poniente del Valle de México.

En ese sentido, se revelo que un estudiante de 19 años perdió la vida tras sufrir lesiones ocasionadas por una caída durante dicho enfrentamiento. Cabe destacar que los hechos involucraron a dos grupos de jóvenes de distintas instituciones educativas de nivel medio superior, ambas pertenecientes a la UNAM.

El CCH Naucalpan, es reconocido por su excelencia académica. Sin embargo, hechos de violencia como este subrayan la importancia de reforzar la seguridad y las condiciones en las que se desarrolla la convivencia escolar. La comunidad estudiantil y académica lamentó profundamente la pérdida del joven estudiante y reitera la necesidad de fomentar entornos seguros para el aprendizaje y el desarrollo, al tiempo que trascendió que la policía del municipio mexiquense tuvo que intervenir, derivando en la detención de por lo menos siete jóvenes, todos ellos señalados por intimidaciones mediante el lanzamiento de explosivos conocidos como petardos.

Un reciente estudio titulado “Violencia y porrismo en la educación superior en México”, revela el origen y evolución de grupos estudiantiles violentos, conocidos como “porros”, en las instituciones de educación superior en México. Dicho texto indica que estos grupos surgieron de una mezcla entre las tradiciones violentas en el ámbito universitario por parte de elementos conservadores y las tácticas autoritarias empleadas por el Estado mexicano durante la época analizada. Este fenómeno dio lugar a la transformación de las federaciones estudiantiles en entidades que replican los mecanismos de control autoritario, momento clave en el cual se comienza a utilizar la denominación “porro” para referirse a los integrantes de estos colectivos.