En un clima de creciente violencia y rivalidad entre bandas en la Ciudad de México, Jorge Flores Concha, conocido como ‘El Tortas’, líder de Fuerza Anti-Unión, diseñó un elaborado plan de alianzas y confrontaciones tras el asesinato de su hermano, Guillermo Sabino Flores Concha.
Este movimiento estratégico fue dirigido en contra de Roberto Moyado Esparza, alias ‘El Betito’, cabecilla del grupo criminal Unión Tepito.
“Tras el asesinato de su hermano, Guillermo Sabino Flores Concha, Jorge Flores Concha, ‘El Tortas’, líder de la Fuerza Anti-Unión, maquinó una estrategia para enfrentar a Roberto Moyado Esparza, ‘El Betito’ y la Unión Tepito, se alió con algunos de sus enemigos, como Los Patines de Venustiano Carranza, y ‘El Mainstream’, de Álvaro Obregón”, se lee en el libro ‘Cártel Chilango’, del periodista Antonio Nieto.
Como parte de su estrategia, ‘El Tortas’ formó alianzas con conocidos rivales de su adversario, entre ellos grupos denominados Los Patines de Venustiano Carranza y ‘El Mainstream’ de Álvaro Obregón, en un intento por fortalecer su posición en el submundo criminal de la capital.
Los acercamientos entre ‘El Tortas’ y sus nuevos aliados surgieron en el contexto de un ambiente altamente volátil, marcado por el enfrentamiento de facciones criminales por el control territorial en diversas áreas de México.
Este período de alianzas improbables se catalizó por la necesidad de responder con fuerza al asesinato del hermano de Flores Concha, una pérdida que lo impulsó a buscar justicia o venganza por medios fuera de la ley. Este tipo de coaliciones subraya la dinámica fluida y a menudo mortal de las relaciones entre bandas en la región, donde enemistades pueden pausarse temporalmente para enfrentar amenazas comunes.
La estrategia de ‘El Tortas’ incluyó no solo alianzas, sino también un detallado plan de acción contra sus enemigos, especialmente enfocado en Unión Tepito y su líder, ‘El Betito’, intentando desestabilizar el control que ejercían en ciertos territorios.
Los movimientos tácticos y las decisiones de Flores Concha después del homicidio de su hermano ilustran la compleja red de rivalidades y alianzas dentro del crimen organizado en México. Estos sucesos destacan la brutalidad y los ciclos de violencia que se perpetúan en la lucha por el dominio entre las organizaciones criminales que operan en la región.
Los enfrentamientos entre estos grupos no solo tienen repercusiones en el ámbito criminal, sino que afectan gravemente a las comunidades donde operan, incrementando los índices de violencia y generando inestabilidad y temor entre la población.