Una de las propuestas de campaña de la candidata de la alianza Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez Ruíz es la de almacenar agua en el Lago de Texcoco para con ello desalinizarla y así hacerle frente a la crisis hídrica que azota al Valle de México. Al respecto, Claudia Sheinbaum Pardo le recordó que la propuesta no es viable debido a que la zona es salada, respuesta que hoy la senadora con licencia dijo, le provocó ganas de reír.
Fue durante el segundo debate presidencial organizado por el Instituto Nacional Electoral (INE) que las aspirantes al Poder Ejecutivo sacaron el tema a flote. Días después, la exalcaldesa de Miguel Hidalgo mantuvo su postura durante una entrevista con el periodista Carlos Alazraki causando isas entre los presentes y, por supuesto, elevando la polémica en redes sociales.
“Claudia, no entiendes que hay plantas que desalan y si está salado en Texcoco le quitas la sal y ya”, dijo.
Durante su más reciente visita a La Paz, Baja California, Gálvez Ruíz insistió en potabilizar el agua del Lago de Texcoco justificando que el proceso es posible; incluso destacó que es como si no se pudiera desalar el agua de mar; sin embargo, insistió en que con el tiempo el Lago de Texcoco se va permeando y el mineral “acaba de irse”, haciendo ver que se trata de un proceso sencillo.
“Mi idea es guardar agua en Texcoco para después potabilizar esa agua. Nosotros vamos a tratar de potabilizar el 100 por ciento del agua residual y reusarla dentro de la Ciudad”.
Respuesta de Sheinbaum le da risa
Cabe destacar que antes de dar dicha explicación, la presidenciable confesó que la respuesta dada por la exjefa de Gobierno de la Ciudad de México durante el segundo debate presidencial, de manera inicial le dio risa; sin embargo insistió en que su objetivo era tratar temas más importantes.
“Cuando la candidata de Morena me cuestionó de que no se podía almacenar agua en Texcoco, me dieron ganas de reírme”.
¿Es una solución a la crisis hídrica del Valle de México?
La crisis hídrica en México se ha intensificado en los últimos años debido a una combinación de factores como: el cambio climático, el aumento en la demanda de agua para consumo humano, agrícola e industrial, y la gestión ineficiente de los recursos hídricos. Varias regiones del país enfrentan escasez de agua, con embalses y acuíferos en niveles críticamente bajos.
La sequía ha afectado a grandes áreas, especialmente en el norte de México, donde la agricultura y la ganadería han visto mermadas sus capacidades productivas. En ciudades como Monterrey, se han implementado medidas de racionamiento de agua para enfrentar la escasez.
El Gobierno de México ha propuesto diversas iniciativas para abordar la crisis, incluyendo proyectos de infraestructura para mejorar la captación y distribución del agua, programas de concienciación sobre el uso eficiente del agua, y políticas de apoyo a las comunidades más afectadas. Sin embargo, expertos señalan la necesidad de adoptar un enfoque más integral que incluya la gestión sostenible de los recursos hídricos, la inversión en tecnología para el tratamiento y reúso del agua, y la implementación de prácticas agrícolas que requieran menos agua.
Aunque en la Ciudad de México se ha manifestado que el Sistema Cutzamala está con niveles bajos y ello ha dado pie a realizar cortes para proteger al vital líquido, no se ha solucionado en su totalidad el bastecimiento del mismo.
INFOBAE México recientemente habló de la propuesta de Gálvez con un experto quien confirmó que sí se puede desalinizar el Lago de Texcoco, pero no es una propuesta viable debido a que, además de implicar fuertes gastos, habría un grave daño ambiental por la emisión de gases que incrementarían los efectos del cambio climático.
“Al calentar esta agua se va a requerir de fuentes como de energías fósiles que generan una gran un gran impacto en la huella de carbono y la huella de carbono, pues son todos esos gases que incrementan los efectos de los daños por el efecto invernadero es lo que todo lo que está generando el cambio climático”.
Además, al ser un área natural protegida, las especies que se encuentran en Texcoco paulatinamente morirían, al tiempo que sería además necesario saber qué sería de los residuos obtenidos pues no basta con separar el mineral del agua, sino que además se debe saber a dónde irán a parar los mismos.
“Es mejor primero tratar las otras aguas que tenemos por métodos de recuperación y eliminación de contaminantes, al final todas estas acciones como ya dijimos van a generar un efecto en el ecosistema, pero antes de generar un impacto que sea incierto como la desalinización, hay que revisar los otros que es tratar nuestras aguas con las que ya contamos y se están contaminadas eliminando de forma controlada los residuos”, remató.