Narco y elecciones 2024: por qué son blanco de más ataques los candidatos locales

El pasado fin de semana la candidata del PT, Minerva Hernández, denunció como fue amenazada con machetes y pistolas mientras “dialogaba” con el presunto dueño de un predio en los limites de Rosarito y Tijuana, Baja California: el hombre se paró frente a su auto y le impidió avanzar, le gritaba y le exigía que no se metiera en lo que no le importaba; como la aspirante no se bajó del auto, su agresor intentó entrar por la ventanilla y le gritó que la mataría. La razón de la amenaza, la promesa de la candidata a presidenta municipal de Rosarito de regularizar la situación de vivienda de decenas de familias.

La amenaza contra la aspirante del PT se suma a las 81 registradas por el análisis de Laboratorio Electoral enfocado al proceso electoral 2023-2024, mismas que sumadas a los 33 atentados, 13 secuestros y 60 personas asesinadas -entre aspirantes, candidatos, funcionarios y familiares de políticos-, suman un total de 187 casos documentados con corte hasta la última semana de abril.

De las 60 personas asesinadas, 31 eran aspirantes a una candidatura y la gran mayoría buscaban cargos de elección popular en el ámbito local: alcaldes, síndicos, regidores y diputados. ¿Por qué son más atacados los candidatos municipales?

Cuando todavía se encontraba al frente de la Secretaría de Gobernación, Olga Sánchez Cordero respondió esta interrogante: “El crimen organizado lo que quiere es territorio y el territorio está precisamente a nivel municipalidad, de ahí la vulnerabilidad en casos de candidatos a elección popular en los municipios, alcaldes y síndicos”.

Las declaraciones de Sánchez Cordero son recogidas por José Reveles en su libro “Necropolítica y narcogobierno. Nuevas políticas de poder en México”, en él también hace referencia a la postura del titular del Poder Ejecutivo, Andrés Manuel López Obrador, quien afirmó que “Ahora el narco quiere poner y quitar candidatos”.

José Reveles advierte que los “narcogobiernos” se convirtieron en un tema aspiracional impulsado por criminales, empresarios y políticos corruptos que, sin importar el partido en el poder, se enfocaron en la “compra de voluntades” a nivel municipal.

En entrevista para Infobae México, el periodista Jesús Lemus -autor de libros como “El Licenciado” y “Los Malditos”- recordó que poco importan los pactos de los grupos políticos a nivel nacional o estatal, pues “a nivel microrregional, cada una de las células está amarrando esta elección que viene, con sus diputados locales, diputados federales, senadores o gobernadores”.

En este sentido, Jesús Lemus recalcó que poco importará que partido gane la próxima elección presidencial, pues lo que mantendrá la estructura criminal de los dos principales cárteles del narcotráfico, serán los pactos y las alianzas que sus células, regadas a lo largo y ancho del país, puedan mantener.

Para garantizar que esos pactos se cumplan o no se muevan, los grupos criminales echaron mano de la violencia en los últimos procesos electorales. Sobra recordar que para el proceso electoral de 2021 los políticos asesinados fueron 88, de los cuales 30 eran precandidatos o candidatos, mientras que en 2018 se contabilizaron 43 víctimas mortales, según datos del Laboratorio Electoral.

Sin embargo, los registros dentro del libro de José Reveles dan cuenta de 102 políticos asesinados entre 2017 y 2018, cuando AMLO dirigió la campaña de la 4T; en ese periodo también se documentaron 112 candidatos amenazados y 46 muertes de familiares de políticos. Además, anexa que la Asociación Nacional de Alcaldes documentó entre 2006 y 2020 los asesinatos de más de 100 presidentes municipales.